Washington. La junta que supervisa el programa de becas para estudios Fulbright de Estados Unidos renunció el miércoles por lo que considera interferencia del gobierno del presidente Donald Trump.
Bautizado en honor al fallecido senador J. William Fulbright, el programa fundado en 1946 otorga unas 8.000 becas al año y es considerado una importante fuente de poder blando de Estados Unidos.

Pero los miembros de la junta, nominados por diferentes presidentes, presentaron su dimisión en bloque, alarmados por lo que denunciaron como un sesgo político en un programa tradicionalmente no partidista.
“El gobierno actual usurpó la autoridad de la junta y negó becas Fulbright a una cantidad significativa de individuos seleccionados para el año académico 2025-2026”, indican en un comunicado publicado online.
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“El gobierno también somete actualmente a otros 1.200 beneficiarios extranjeros de Fulbright a un proceso de revisión no autorizado y podría rechazar más”, señalan.
Según el texto, las acciones de la administración Trump “son antitéticas a la misión de Fulbright y los valores, incluido el derecho a la libre expresión y libertad académica, que el Congreso especificó en el estatuto” fundacional.
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El gobierno de Trump está duramente enfrentado a las universidades estadounidenses, a las que acusa de tendencias izquierdistas y antisemitas y ha recortado miles de millones de dólares en fondos federales para la investigación.
Recientemente, el Departamento de Estado suspendió el procesamiento de visas para estudiantes extranjeros, quienes son una fuente importante de ingresos para las universidades estadounidenses, para revisar las publicaciones en redes sociales de los solicitantes.
