FILADELFIA (AP) La investigación sobre una falla en un motor de un avión de Southwest Airlines se está enfocando en si la erosión prematura del metal causó que una aspa interna se rompiera, desencadenando una catastrófica cadena de eventos que provocó la muerte de una pasajera.
Fue el primer deceso de un pasajero en una aerolínea estadounidense desde 2009.
A partir de los hallazgos iniciales de los investigadores, el accidente parece notablemente similar a una falla en otro avión de Southwest hace dos años.
Ese hecho llevó al fabricante del motor y a los reguladores a presionar para que se realizaran inspecciones ultrasónicas de las aspas de los ventiladores de los motores como la que voló en pedazos el martes a 32.500 pies de altitud sobre Pensilvania.
Cuando los investigadores de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) examinaron el motor averiado en Filadelfia unas horas después de que aterrizara de emergencia, inmediatamente vieron que faltaba una de las 24 aspas del ventilador del motor izquierdo.
“Esta aspa de ventilador se rompió justo en el eje y nuestro examen preliminar de esto fue que hay evidencia de merma del metal donde se separó ” , dijo el presidente de la NTSB, Robert Sumwalt.
El debilitamiento del metal se debe al uso repetido e implica grietas microscópicas. Se puede presentar en aspas de ventiladores, la capa de aluminio en la mayoría de los aviones y en otras partes metálicas de las aeronaves.
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Los investigadores se centrarán en si la aspa se rompió a velocidad de crucero –alrededor de 500 millas por hora–, desatando una falla “ incontenible ” del motor que hizo que los escombros volaran como metralla contra el avión, donde rompió una ventanilla.
Los fragmentos metálicos resultantes causaron un orificio en una ventanilla.
Jennifer Riordan, una pasajera que estaba sentada al lado fue succionada parcialmente debido a la descompresión súbita en la cabina, antes de que algunos pasajeros la sujetaran para evitar que saliera expulsada.
Sin embargo, Riordan sufrió heridas graves y murió posteriormente.
Riordan era una ejecutiva bancaria de Wells Fargo y madre de dos hijos originaria de Albuquerque, Nuevo México. Otras siete personas resultaron con heridas menores, informaron las autoridades.
Los pilotos del avión, un Boeing 737 de dos motores que viajaba de Nueva York a Dallas con 149 personas a bordo, hicieron un viraje rápido y aterrizaron de emergencia en Filadelfia poco antes del mediodía, mientras los pasajeros respiraban a través de las mascarillas de oxígeno de la nave y se preparaban para un posible impacto.
"¡La piloto Tammy Jo fue increíble!"
Tammie Jo Shults, la piloto del avión de Southwest Airlines es celebrada como una heroína por sus nervios de acero y un perfecto aterrizaje de emergencia.
De 56 años, residente de Texas y madre de dos hijos, fue una de las primeras mujeres en pilotar cazas en la Marina estadounidense en los años 1980 y también una de las primeras en pilotar el caza F-18 Hornet.
Mantuvo una calma increíble en su conversación con el operador de la torre de control de Filadelfia, minutos antes del aterrizaje de emergencia.
”La piloto Tammy Jo fue increíble! Nos hizo aterrizar sanos y salvos en Filadelfia”, escribió en Instagram la pasajera Amanda Bourman, una madre de tres hijos que viajaba junto a su marido.
“Esta es una verdadera heroína estadounidense”, escribió otra pasajera, Diana McBride, en Facebook, donde celebró “el conocimiento y valentía” de la piloto y contó que tras el aterrizaje, Shults “vino a hablar con cada uno de nosotros personalmente”.
Usuarios de las redes sociales comparan a Shults con el capitán Chesley “Sully” Sullenberger, el piloto del vuelo de US Airways que aterrizó en el río Hudson frente a Manhattan en 2009 tras un accidente causado por pájaros, salvando a todos los pasajeros y tripulantes.
Su hazaña fue convertida en una película nominada al Oscar, “Sully” (2016), de Clint Eastwood, en la cual el piloto es encarnado por Tom Hanks.”
"Perdimos parte de la nave"
"Southwest 1380, tenemos un solo motor. Perdimos parte de la nave, así que precisaremos desacelerar un poco”, dice la pilota Shuts con voz calma al operador de la torre de control de Filadelfia, poco antes del aterrizaje, en un diálogo difundido por el canal CBS.
”¿Pueden esperarnos los médicos en la pista también? Tenemos pasajeros heridos”, añade.”
¿Está el avión físicamente en fuego?”, le pregunta el operador. “No, no está en fuego pero le falta una parte”, responde Shults con voz calma, reteniendo la emoción.
“Dijeron que hay un agujero y que alguien se fue”.
Todos decían a Shults que no podría ser piloto si era mujer. La Fuerza Aérea incluso le negó el permiso para pasar el examen de aviación, pero la Marina la aceptó.
Allí Shults creció como piloto y llegó a aterrizar cazas en portaaviones a 240 km/h.
Eventualmente, se tornó instructora. Aunque no se le permitía volar en combate porque era mujer, volaba como un piloto agresivo, según un foro de aviación militar que la describe.
Kristopher Johnson, uno de los pasajeros, la calificó a ella como una heroína y publicó en su cuenta de Twitter una foto que le hizo poco antes de descender de la nave.
@SouthwestAir These are the hero’s of SWA 1380 NYC to Dallas We lost an engine mid-flight and they guided back to Philly saved 149 on board pic.twitter.com/RNA8sXRBZA
— Dr. Kristopher Johnson (@VVHS_DrJohnson) April 17, 2018
Otra pasajera, Diana McBride Self, publicó en su Facebook que “Tammie Jo Schults, la pilota, regresó a hablar con uno de nosotros, personalmente. Ella es una verdadera héroe americana. Agradecida por su pericia y su coraje en esta traumática situación", dijo.
Alfred Tumlinson, un pasajero originario de Corpus Christi, Texas, afirmó que la comandante tiene "nervios de acero". "Esa señora, la aplaudo. Voy a enviarle una tarjeta en Navidad. Voy a decir enviarle un certificado de regalo por traerme a tierra", manifestó a AP.
"Mi héroe lleva un sombrero tejano”
La mujer que falleció, de 43 años, fue identificada por su empleador como Jennifer Riordan, de Albuquerque, una madre de dos hijos que era vicepresidenta de una sucursal del banco Wells Fargo en Nuevo México.
Estaba sentada junto a una ventana que estalló al recibir esquirlas del motor, fue succionada al exterior pero en medio de los gritos y las máscaras de oxígeno que caían, otros dos héroes -un pasajero que llevaba sombrero de cowboy y un bombero, identificados por la prensa estadounidense como Tim McGinty y Andrew Needum- lograron atraparla y meterla nuevamente dentro de la nave.
Riordan estaba gravemente herida.
Needum y una enfermera intentaron en vano hacerle resucitación cardiopulmonar, contó la pasajera Sheri Sears, pero la mujer murió luego de ser trasladada al hospital.
Otras siete personas tuvieron heridas leves.
Tras la explosión, McGinty intentó tapar el agujero en el fuselaje con su espalda, aguantando durante unos 20 minutos una extrema presión.
“Algunos héroes visten capas, pero el mío lleva un sombrero tejano”, dijo a USA Today su esposa, Kristen McGinty.
Se desconoce aún la causa del estallido del motor fabricado por CFM, un joint venture entre la estadounidense General Electric y la francesa Safran.Robert Sumwalt, jefe de la NTSB, el organismo federal de seguridad en el transporte, admitió poco después del incidente que éste se asemejaba a otro con un motor igual (CFM-56) ocurrido en otro B-737 de Southwest en agosto de 2016, que aterrizó en Florida sin víctimas.
Sumwalt indicó que una primera inspección del motor dañado mostraba que una lámina del ventilador del motor había desaparecido, y habló de una “fatiga del metal”.
Southwest anunció por su lado nuevas inspecciones adicionales de los motores CFM-56 por precaución.