
San Sebastián, España. AFP. El adiós a las armas de ETA fue saludado ayer por Francia y la Unión Europea (UE) como una victoria de la democracia, así como por la izquierda independentista vasca, que aclaró que esa decisión no implica el fin de la lucha política por la secesión.
El presidente francés, Nicolás Sarkozy, dijo que la renuncia de ETA representa una “victoria de la democracia sobre la violencia”.
ETA, que reivindica la independencia de Euskal Herria, una gran nación vasca que abarcaría desde el País Vasco y Navarra en el norte de España hasta la región vasca del suroeste de Francia, llamó en su comunicado del jueves a los Gobiernos de España y Francia a “abrir un proceso de diálogo directo”.
Francia fue considerada mucho tiempo como un santuario de los militantes de ETA, pero en los últimos años la Policía propinó duros golpes a la cúpula del grupo.
El presidente de la Unión Europea, Herman Van Rompuy, afirmó que la renuncia de ETA a las armas “representa una derrota para el terror y una victoria para la democracia, la libertad y el Estado de derecho” y honró la memoria de las 829 víctimas de ETA en 40 años.
El ex primer ministro británico Tony Blair se congratuló por su lado por el fin de la “última confrontación armada de Europa”.