
El subsecretario de Estado de Estados Unidos, Christopher Landau, advirtió a Honduras que su país actuará con toda la “firmeza a cualquier atentando contra la integridad del proceso democrático”.
El país centroamericano celebrará elecciones general el próximo 30 de noviembre. El clima electoral en Honduras está fuertemente polarizado por acusaciones entre la izquierda gobernante y la oposición de derecha de estar preparando “golpes” y “fraudes”, y por causas judiciales abiertas contra altos funcionarios encargados de organizar las elecciones del 30 de noviembre.
“Nuestro gobierno sigue de cerca la situación y exhorta a todas las autoridades competentes, incluidas las electorales y las militares, a que respeten escrupulosamente las leyes y la Constitución de Honduras. El presidente Donald Trump, el secretario Rubio y yo nos preocupamos profundamente por el hemisferio occidental y responderemos con rapidez y firmeza a cualquier atentando contra la integridad del proceso democrático en Honduras”, dijo Landau.
Según las encuestas, el comunicador Salvador Nasralla, del derechista Partido Liberal (PL), la abogada Rixi Moncada, del gobernante partido Libertad y Refundación (Libre, izquierda), y el empresario Nasry Asfura, del Partido Nacional (PN, derecha), están en empate técnico.
A menos de tres semanas de los comicios, el Consejo Nacional Electoral (CNE) no ha podido adjudicar el contrato para el transporte del material electoral y el domingo hizo un simulacro que mostró fallas de organización.
OEA preocupada por elecciones en Honduras
La Organización de Estados Americanos (OEA) expresó este martes su preocupación por los problemas que atrasan los preparativos de los comicios generales del 30 de noviembre en Honduras, y pidió garantías para las autoridades electorales.
El subsecretario de Estado de Estados Unidos dijo que su país “comparte la preocupación expresada por la OEA con respecto al proceso electoral que se desarrolla en Honduras por las elecciones del 30 de noviembre”.
En un comunicado, la secretaría general de la OEA expresó “su preocupación” por acusaciones de la fiscalía, afín al gobierno, contra una consejera electoral y dos magistrados que representan a los partidos opositores en el tribunal que dirime diferendos en los comicios.
Las autoridades electorales deben poder realizar su “labor técnica de conformidad con la ley, libres de injerencias y presiones indebidas de cualquier actor político”, subrayó.
“Es responsabilidad del Estado garantizar la autonomía, la continuidad y el libre ejercicio de estas instituciones”, reclamó la secretaría general.

