Ciudad del Vaticano. La salud del Pontífice copaba este martes todas las portadas de los grandes diarios italianos. “La hospitalización del papa Francisco se prolonga”, titulaba Il Corriere della Sera. Por su parte, La Repubblica destacó su “cuadro clínico complejo”.
Se trata del cuarto internamiento del Pontífice en menos de cuatro años, lo cual ha relanzado el debate sobre su salud, especialmente porque su ingreso llega al inicio del año jubilar de la Iglesia católica, lo que implica una larga lista de eventos.
Desde su elección como Santo Padre, el jesuita ha dejado siempre abierta la opción de dimitir en el caso de que su salud le impidiera seguir desempeñando sus funciones.
Su antecesor, Benedicto XVI, sorprendió al mundo en el 2013 convirtiéndose en el primer Papa desde la Edad Media en renunciar, alegando problemas de salud.
Pero en un libro publicado en el 2024, Francisco aseguraba no tener “ninguna razón, lo suficientemente seria, como para pensar en dimitir”.
La dimisión es una “hipótesis lejana” que solo se justificaría en caso de “impedimento físico grave”, indicó.

Ímpetu incansable
Conocido por su ímpetu, Francisco ha preferido seguir adelante a pesar de los sobresaltos de salud y sin aligerar su cargada agenda. Ni siquiera el hecho de haber perdido una parte de un pulmón, en su juventud, ha logrado aplacar su vitalidad.
En setiembre del 2024 realizó una gira de doce días por cuatro países de Asia y Oceanía, el mayor viaje de su papado en duración y distancia.
No obstante, es evidente que en los últimos tiempos ha mostrado algunos signos de deterior.
De hecho, antes de su última complicación de salud, a causa de una neumonía, el jefe de la Iglesia católica apareció debilitado, con el rostro hinchado, la voz entrecortada y había delegado en varias ocasiones en sus asistentes la lectura de sus discursos.
El pasado domingo, siguió la misa por televisión desde el hospital y envió un mensaje escrito durante el Ángelus.
“Hubiera querido estar presente entre ustedes, pero, como saben, me encuentro aquí en el Policlínico Gemelli, porque aún necesito algunos cuidados para mi bronquitis”, escribió Francisco.