Brasilia. La cifra de incendios forestales en Brasil creció 12,7% en el 2020 para registrar un máximo en la última década, de acuerdo con números oficiales que pueden aumentar la presión sobre el gobierno de Jair Bolsonaro ante la destrucción de la selva amazónica.

Hubo un total de 222.798 incendios forestales en todo el país el año anterior, el número más elevado desde el 2010, según datos de la agencia espacial brasileña INPE en su más reciente informe, divulgado por la prensa local este domingo.

Esto incluye más de 103.000 incendios en la Amazonía brasileña, un aumento anual de casi 16%, informó el INPE, que utiliza imágenes satelitales para seguir los fuegos y la deforestación.

También incluye más de 22.000 fuegos en la parte brasileña del Pantanal, el humedal más grande del planeta, que fue devastado el año pasado con un aumento de más de 120%.

La Amazonía y el Pantanal son dos de los ecosistemas más valiosos del mundo.

La mayor selva tropical del globo, compartida por nueve países y territorios de América del Sur, es considerada vital para detener el cambio climático gracias al dióxido de carbono que absorbe de la atmósfera.

Casi el 62% de su extensión se encuentra en territorio brasileño.

El Pantanal, más al sur, es un paraíso de biodiversidad que se extiende desde Brasil hacia Bolivia y Paraguay.

Casi un cuarto del Pantanal brasileño fue azotado por incendios en el 2020, en medio de la peor sequía en casi medio siglo.

Imágenes de paisajes quemados y restos de animales calcinados impactaron al mundo y generaron críticas al gobierno de Bolsonaro por no detener la destrucción.

Baterías contra Bolsonaro

El presidente, un ultraderechista, quien se muestra escéptico ante la noción de cambio climático, también enfrenta críticas por el agudo aumento de la deforestación amazónica.

De acuerdo con grupos protectores del medio ambiente, el impulso del gobierno a los negocios de agricultura y minería, sumado a los recortes en el presupuesto de agencias ambientales, han acelerado la destrucción.

En el año móvil a agosto del 2020, la deforestación afectó a una zona mayor a la superficie de Jamaica, un récord en los últimos 12 años, siempre según la INPE y su programa PRODES para el seguimiento del problema.

Expertos creen que los incendios en la Amazonía los inician principalmente personas que buscan espacio para la agricultura y la ganadería.

La cifra de deflagraciones ya se había elevado 48% en el 2019, el primer año de Bolsonaro en el poder.