Miami. La temporada de huracanes del Atlántico será una de las más activas que se hayan pronosticado, informaron meteorólogos estadounidenses este jueves, cuando elevaron a hasta 25 la cantidad de tormentas tropicales con nombre que prevén este año.
Debido a las actuales condiciones oceánicas y atmosféricas, "este año esperamos tormentas más fuertes y duraderas que el promedio", dijo Gerry Bell, meteorólogo del centro de predicciones de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), en un comunicado.
Los meteorólogos prevén que el 2020 verá la formación de entre 19 y 25 tormentas con nombre, de las cuales entre siete y 11 ganarán fuerza de huracán. Tres a seis de ellas serán huracanes de gran intensidad (de categorías 3, 4 o 5), con vientos de más de 178 Km/hora.
En la previsión difundida en mayo y que fue actualizada este jueves, la NOAA calculaba que habría entre 1 y 19 tormentas, de las cuales de seis a diez se volverían huracán.
Es uno de los pronósticos más activos que esta oficina, con sede en Miami, haya producido en los 22 años que lleva prediciendo huracanes, añadió el comunicado.
La predicción incluye las nueve tormentas -y dos huracanes- que ya se han formado hasta ahora, en un año "extremadamente activo" del cual los residentes del Caribe y del sur de Estados Unidos ya han tomado nota.
Normalmente, para agosto solo se han formado un par de tormentas con nombre, mientras la novena no aparece sino hasta principios de octubre. Una temporada promedio produce 12 tormentas con nombre.
Rastro de Isaías
Pero Isaías, la novena tormenta tropical de este año, acaba de azotar el Caribe y dejar cinco muertos en el sureste de Estados Unidos, mientras se convertía esporádicamente en huracán de categoría 1.
A última hora del martes, Isaías se debilitó y fue recalificado como un ciclón postropical, una categoría inferior a la de tormenta tropical, en tanto avanzaba hacia el sureste canadiense, donde debería disiparse a más tardar el jueves, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC).
El pronóstico para Quebec advierte sobre vientos de hasta 80 km/h y fuertes lluvias.
A su paso por el noreste de Estados Unidos, Isaías causó destrozos y víctimas mortales en varios estados, tapizando las calles de escombros, cerrando carreteras y obligando a cancelar de decenas de vuelos.
Dos personas murieron en Carolina del Norte cuando un tornado devastó una casa móvil. Otras dos personas perdieron la vida por caídas de árboles sobre sus vehículos, una en Nueva York y la otra en Maryland.
En Delaware, una mujer de 83 años fue encontrada sin vida debajo de la rama de un árbol, cerca de su hogar.
Las autoridades de Nueva York instalaron diques de protección en el bajo Manhattan en previsión de un aumento en los niveles del agua, pero la lluvia no fue tan fuerte como se temía.
“La tormenta ha sido más de viento que de inundaciones hasta el momento, gracias a Dios”, declaró el alcalde Bill De Blasio al canal local NY1.
Algunos servicios de transporte público fueron suspendidos, incluido el ferri a Staten Island. Al menos 78 vuelos fueron anulados en el aeropuerto de LaGuardia y 55 en el John Fitzgerald Kennedy.