
Madrid. La onza de oro troy, activo refugio por antonomasia, se ubicó en nuevos máximos históricos en la mañana de este lunes al apreciarse un 1,7%, hasta situarse en los $3.823 dólares, alentado por el posible cierre de la Administración de Estados Unidos, cuya fecha límite es mañana.
Según los datos del mercado consultados por Europa Press, el metal dorado acumula una revalorización superior al 45% en lo que va de año y de un 28% desde el 14 de marzo, cuando superó por vez primera la cota de los $3.000. Sólo en setiembre, la subida se sitúa en torno al 11%.
Este impulso del oro se produce en un momento de incertidumbre de cara a un hipotético acuerdo legislativo entre republicanos y demócratas en Estados Unidos que permitiría evitar el cierre de la Administración (shutdown).
A este respecto, los analistas de Renta 4 señalaron que, como viene siendo habitual, es previsible un acuerdo de última hora para ampliar el techo de deuda, aunque sólo sea hasta mediados de noviembre: “En caso de no ser así, se correría el riesgo de no publicación de datos tan relevantes como el de empleo de esta semana”, vaticinaron.
Precisamente, los expertos de la entidad valoraron que las expectativas en torno al informe de empleo son otro catalizador al alza para el oro, ya que el mercado se debate sobre la posibilidad de un nuevo informe débil que aumente la probabilidad de recortes de tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed).
Cabe recordar que el oro y el dólar mantienen una correlación inversa, ya que cuando baja el precio del dinero (los tipos de interés) son necesarios más dólares para comprar lingotes, mientras que una política monetaria dura presiona el precio del metal.
En un plano más amplio, la geopolítica ha sido otro motor de consideración para los avances del metal precioso en setiembre, toda vez que Rusia ha violado el espacio aéreo del flanco oriental de la OTAN; Trump ha dado su respaldo a Kiev frente a Moscú y la presión internacional se ha incrementado en torno a Israel bajo las acusaciones de genocidio en Gaza y el reconocimiento del Estado de Palestina.
Un informe de Goldman Sachs publicado a principios de mes contemplaba que el oro llegase a $4.000 para 2026, aunque también valoraba un escenario más pesimista en el que la cotización alcanzaría los $5.000 si la ofensiva de Donald Trump contra la Reserva Federal (Fed) termina por socavar la credibilidad de la institución.
