
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) presentó este jueves tres propuestas para fortalecer el desarrollo productivo de la región y se destacó a Costa Rica como modelo de transformación productiva.
Para reducir los niveles de baja productividad de la región, el organismo plantea la implementación de políticas de desarrollo productivo que involucren tres áreas principales: apostar por el sector de ciencia, tecnología e innovación; impulsar iniciativas de articulación productiva (clústeres) e incentivar iniciativas “verdes” (transición energética).
De acuerdo con el estudio Panorama de las Políticas de Desarrollo Productivo en América Latina y el Caribe 2025, la mayoría de los países de la región enfrentan tres “trampas” del desarrollo que limitan la mejora en el bienestar de su población: baja capacidad para crecer; alta desigualdad, baja movilidad social y débil cohesión social; y bajas capacidades institucionales y gobernanza poco efectiva.
Para atender estas dificultades, la Cepal destacó que la región no saldrá de la trampa de baja capacidad para crecer mientras no aborde el gran reto de productividad y de transformación productiva que enfrenta.
José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Cepal, indicó que la productividad de la región ha venido en declive en la última década y existe una amenaza de que se instale una “década perdida”, similar a la que sucedió en los años 80 y entre 2014 y 2023, caracterizadas por el estancamiento del crecimiento económico.
“Tenemos que evitarla y este el tipo de cosas que hay que hacer”, apuntó Salazar, a la vez que reveló que entre 2014 y 2024 la economía de la región creció 0,9%, mientras que en la década de los 80 se creció 2%. “No es un tema solo de crecimiento, hay una tasa muy baja de creación de empleos”, agregó.
Salazar consideró que los esfuerzos en ciencia, tecnología e innovación no están suficientemente alineados con las políticas de desarrollo productivo de los países, además de que se hace necesaria la cooperación entre todos los actores económicos. Por eso, planteó desarrollar las Iniciativas de Articulación Productiva (IAP), en donde los clústeres son el principal referente.
De acuerdo con el estudio, en Costa Rica se identificaron 11 IAP, con lo que se ubica en la sétima posición junto con Perú, de un total de 20 países analizados. Brasil encabeza la lista con 367 iniciativas.
Costa Rica como ejemplo
Salazar dijo que la transformación productiva también implica crear lo que no existe.
“Costa Rica creó lo que no existía, eso es parte del reto, cómo atraer inversiones”, indicó tras identificarse como costarricense.
El funcionario destacó que las principales exportaciones de Costa Rica son los servicios modernos, los dispositivos médicos y el turismo, sectores que hace 30 años no se perfilaban.
“Cuando un gobierno y una sociedad se proponen un objetivo, cuando le entra con ganas a esta agenda de desarrollo productivo se puede transformar. Hay ejemplos en América Latina, mi país ha sido un éxito”, destacó Salazar.
Por otro lado, la Cepal señala que el cambio climático y la transición energética representan grandes oportunidades para la transformación productiva de la región.
Marco Llinás Vargas, director de la División de Desarrollo Productivo y Empresarial de la Cepal, señaló que para llevar a cabo estas recomendaciones se deberá elevar el perfil político de estas iniciativas.
“Que sean un elemento central de discusión pública en nuestros países. Profundizar en qué y cómo hacerlo”, planteó.
“Aquí la disyuntiva está clara y es contundente: una tercera década pérdida o el inicio de una nueva era de crecimiento sostenido e inclusivo a través de las políticas de desarrollo productivo”, planteó Llinás.
