
El doctor Isaías Salas Herreras, reconocido por su gran labor en la ayuda a pacientes con cáncer y otras enfermedades terminales, ganó ayer el premio Atención Humanitaria en su edición 2008.
Este galardón es otorgado por la junta directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Según informó esa instancia, a Salas, tilaranense de 54 años, se le considera “pionero de la medicina del dolor y cuidados paliativos en Costa Rica”.
Salas es doctor en Terapéutica Médica, graduado en Gran Bretaña, y trabaja desde hace casi dos décadas en el país en este campo.
“Entre los muchos aspectos que la junta directiva tomó en cuenta para asignarle la distinción al doctor Isaías Salas destaca la labor desarrollada por él durante más de 15 años en favor de los pacientes con cáncer y otras enfermedades terminales y crónicas”, dictaminó el jurado médico.
Entre los principales aportes del doctor Salas a la comunidad costarricense se cuentan la creación de un total de 36 “clínicas del dolor”, ubicadas en diferentes centros médicos de la CCSS.
Cada uno de esos centros cuenta con especialistas a cargo de la atención integral a todas las personas que sufren de diferentes padecimientos crónicos y terminales.
Otro gran logro es la próxima apertura en Costa Rica de una especialidad en Medicina del Dolor y Cuidados Paliativos. Esta carrera profesional se comenzará a impartir en febrero del próximo año, en coordinación con la Universidad de Costa Rica.
Finalmente, destaca también su empeño en la construcción del nuevo Centro Nacional de Control de Dolor y Cuidados Paliativos, una unidad que tendrá su sede en barrio Escalante.
Este edificio tendrá cuatro niveles y contará con áreas para docencia, terapia respiratoria, procedimientos invasivos, enfermería y nutrición, entre otros.
Enseñanza. “Los enfermos me han dejado grandes enseñanzas en lo personal, profesional y familiar; sobre todo, aprendí a valorar cada segundo que se vive pues la vida es un paso muy corto”, expresó el especialista al conocer del premio.
Y añadió: “El diario convivir con pacientes a los que les restan pocas semanas de existencia me ha generado importantes cambios. Me han ayudado a ser más sensible, más solidario, a trabajar en equipo y, desde luego, a no permitir que sufran ni mueran con dolor”.
La entrega del premio se efectuará en la Casa Presidencial, una fecha aún no definida.