El presidente de Benin Patrice Talon fue reelecto sin sorpresa, con 86% de votos, según resultados provisionales anunciados el martes por la Comisión electoral, en comicios donde el jefe de Estado enfrentaba dos candidatos de casi desconocidos.
"El dúo Patrice Talon y Mariam Talata (su vicepresidenta) obtiene desde la primera vuelta la mayoría de los sufragios" declaró Geneviève Boko Nadjo, la vicepresidenta de la Comisión electoral nacional autónoma (CENA).
Los benineses votaron el domingo tras una campaña sin entusiasmo marcada por la violencia en el centro del país, donde los manifestantes protestaron contra unos comicios confiscados por el jefe del Estado saliente.
La reelección de este antiguo magnate del petróleo llegado al poder en 2016 y que gobierna con mano de hierro no parecía peligrar. Sus adversarios fueron dos candidatos prácticamente desconocidos, los exdiputados Alassane Soumanou y Corentin Kohoué.
Elogiado durante mucho tiempo por su vitalidad democrática, este país africano vivió una campaña sin emociones en el sur, mientras que el norte hubo violencia.
En Benín, el 38% de la población vive bajo el umbral de pobreza y el desempleo de los jóvenes está disparado.
Para su próximo mandato de cinco años el presidente, que estaba convencido de lograr una "victoria por nocaut" en los comicios, prometió continuar con "el desarrollo", según su eslogan de campaña.
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