Un cultivo llamado abacá, de la familia del banano y el plátano, pero del cual se aprovecha el tallo, renueva la esperanza para miles de familias en la zona rural.
El tallo de la planta se utiliza para obtener fibra natural de muy alta calidad.
Ese material se destina a fabricar filtros para café, bolsitas para té, papel para billetes, filtros especiales para laboratorio y hasta para filtros de automóviles.
Las empresas que utilizan la fibra de abacá en el mundo importan el 80% de su materia prima desde Filipinas, pero en los últimos años tuvieron problemas de estabilidad y volumen.
Ante tal situación pidieron buscar otros posibles abastecedores y su asesor, John R. Washington, inició hace año y medio el proyecto en Costa Rica.
Aquí encontró, según dijo, las mejores condiciones de clima y suelo para ese cultivo. Costa Rica se puede convertir, dijo, en el de mayor rendimiento y calidad en el orbe en este campo.
Un aspecto esencial es que, a diferencia de Filipinas y otros productores, algunas zonas de Costa Rica, como el Caribe, no tienen una época seca definida de varios meses. En la estación seca, la planta reduce el rendimiento.
Esencial también es que esta planta es resistente a la sigatoka, un hongo que es la principal enfermedad de las musáceas (banano, plátano, guineos).
Washington, quien es presidente de Abatex, firma dedicada a producir y exportar la fibra, calculó que los rendimientos del abacá aquí son tres veces mayores que los de otros proveedores mundiales.
La distribución del cultivo entre miles de productores es posible porque, incluso, resulta rentable sembrar desde una hectárea, según la experiencia de Abatex.
La mayoría de las plantaciones se establecerán en el Caribe, aunque hay interés de productores de las zonas norte y sur, cerca de Palmar de Osa, Puntarenas, donde antes hubo fincas bananeras y quedó mucha infraestructura en desuso.
Washington dijo que su firma ofrece a los productores un contrato a largo plazo con precio mínimo, lo cual diferencia a este proyecto de otros fallidos como el palmito y la macadamia.
Abatex exportará en octubre próximo el primer cargamento de 5.000 kilos de fibra de esta planta. El destino de ese volumen es Alemania y fue aportado por dos de los productores del proyecto.
La empresa espera que en unos tres años el área de cultivo sea superior a las 500 hectáreas. En ese momento instalará una planta para realizar el primer proceso de la fibra seca y exportar desde aquí la pulpa.