
En el 2012, el país vivió la peor temporada de incendios forestales de los últimos cinco años. Desde enero hasta abril, el fuego consumió 34.287 hectáreas; 24.789 hectáreas más que en el 2011.
La cantidad de terreno quemado equivale a casi 500 veces el Parque Metropolitano La Sabana.
Así lo dio a conocer la Comisión Nacional sobre Incendios Forestales (Conifor), dependencia del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac).
Según Luis Diego Román, coordinador de Conifor, en total se atendieron 105 incendios forestales. De estos, 81 fueron dentro de áreas silvestres protegidas, como parques nacionales y reservas, mientras 24 se dieron en fincas privadas.
Los parques nacionales Barra Honda (Nicoya), Santa Rosa (La Cruz) y Chirripó fueron los más afectados, pero también la Reserva Lomas de Barbudal (Bagaces), el Refugio Caño Negro (Los Chiles), Tivives (Esparza) y el humedal Corral de Piedra (Nicoya).
Lo anterior coincide con previsiones del
A la amenaza propia del cambio climático, se suma la acción del ser humano. Más del 80% de los incendios fueron causados por quemas agropecuarias y de repastos, vandalismo, cacería y venganza.
“La principal causa del aumento sigue siendo el desconocimiento y la necedad de la gente de realizar quemas, vandalismo y otras acciones que se salen de las manos y no pueden controlarse”, explicó ayer Ana Lorena Guevara, ministra
“Desde el 2009 se cuenta con un decreto ejecutivo que regula las quemas (...). Este año se tramitaron 685 permisos, pero hay que trabajar fuertemente con los campesinos que realizan quemas no autorizadas”, destacó Román.
Debido a estos incendios forestales, Costa Rica emitió 402.417 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.
Asimismo, la atención de incendios demandó ¢581 millones, monto que provino tanto de recursos estatales como aportes dados por el Banco Nacional; de la empresa privada, los gobiernos locales y las organizaciones no gubernamentales. En total, 2.775 personas ayudaron a combatir el fuego.