Los Ángeles, (ee. uu).- efe Resultaron ciertos los rumores que apuntaban a que Twin Peaks , serie célebre de principios de la década los años 90, podría volver 25 años después de su nacimiento.
Tras la alarma que despertó una serie de mensajes en Twitter de los creadores de la ficción de televisión, el canal Showtime confirmó la noticia ayer. No se trata de un refrito sino de una secuela ambientada en la época actual, la cual contará con nueve capítulos.
La temporada, que se emitirá en el 2016, será una continuación de la serie original, y seguirá bajo la dirección de David Lynch.
Fueron los propios guionistas de Twin Peaks , David Lynch y Mark Frost, quienes pusieron a sus fans en alerta con la publicación de unos misteriosos tuits:
“Queridos amigos de Twitter: Ese chicle que nos gusta se va a poner de moda #damngoodcoffee”.
Este mensaje podría haber pasado inadvertido si no fuese porque los dos cineastas lo publicaron a la vez, y porque los fans de Twin Peaks consiguieron darle un sentido a la frase. La cita provenía del tercer capítulo de la primera temporada y, tal y como avanzaron algunos seguidores, ha augurado su vuelta a la televisión.
Serie de peso. La serie, ganadora de tres Globos de Oro, se conformó de 30 capítulos divididos en dos temporadas. Arrancaba con el descubrimiento del cadáver de Laura Palmer, una joven de Twin Peaks , un pueblo ficticio del noreste estadounidense. El crimen revolucionará el pueblo que siempre había vivido tranquilo bajo la atenta mirada del sheriff Harry S.Truman (Michael Ontkean).
El sheriff Truman tendrá que aprender a trabajar con el agente especial Dale Cooper, interpretado por Kyle MacLachan ( Terciopelo azul ), un agente del FBI que llegará al pueblo de Twin Peaks para dirigir la investigación del asesinato de Laura Palmer.
Mediante las pesquisas del dúo formado por el agente local y el investigador federal se descubren secretos ocultos durante mucho tiempo: pasiones prohibidas, avaricia, celos, intriga e incluso sucesos sobrenaturales.
Esta es una serie que con su estética y con su sórdida y desconcertante atmósfera marcó un antes y un después en la historia de la televisión en los Estados Unidos.