Levantarse a las 5 a. m. era cosa del pasado para el periodista y presentador Sergio González. Su rutina fuera de la televisión se iniciaba a las 8 a. m. y así estaba bien.

Sin embargo, desde el pasado 31 de mayo, poner el despertador y levantarse cuando apenas está amaneciendo para ir a trabajar a la televisión es un motivo más de agradecimiento. Desde ese día, el comunicador forma parte de La revista, de Multimedios, como presentador.

González, quien se había alejado de la televisión para dedicarse a posicionar su carrera como entrenador personal, volvió a la pantalla tras una oferta que canal 8 le hizo para ocupar el espacio que dejó semanas atrás Lussania Víquez.

“Yo ya estaba colaborando en La revista, pero solo era colaborador, es decir, era el presentador suplente. Sin embargo, cuando Lussania renuncia, comienzan a buscar un presentador hombre y me dicen a mí. Cuando yo me hice entrenador personal, no esperaba regresar a la televisión, era un sueño que yo dejaba ahí y ahora Multimedios me da esta oportunidad de trabajar aquí en las mañanas”, afirma el comunicador, de 28 años.

De acuerdo con Sergio, uno de los motivos que lo empujó a aceptar el trabajo fue precisamente el horario, pues tener un rol de presentador en un programa matutino le permite continuar siendo entrenador personal por las tardes. Afirma que para él sus clientes “son importantísimos”.

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Aunque insiste en que “las madrugaditas me cuestan”, el presentador llega a su trabajo alegre y muy agradecido con sus jefes —Gilberto Valencia, José Eduardo García y Alejandro Martínez— por esta nueva oportunidad que lo reta como comunicador. Según explica, a diferencia de sus trabajos anteriores en televisión, ya no será solo el periodista que sale frente a cámaras, sino que también es el presentador de una revista matutina informativa.

Por ello, el comunicador, quien por mucho tiempo fue figura de Repretel, considera que este trabajo le permite desafiarse a sí mismo como profesional y demostrar su conocimiento, sin dejar de lado su faceta periodística.

De hecho, González afirma que en la actualidad un presentador no es “solo una cara bonita” que sale frente a la cámara, y que por el contrario, el conductor debería “mojarse los zapatos” y estar preparado para cubrir cualquier acontecimiento de última hora.

“Creo en un presentador que mañana te pueda amanecer en una inundación y que al día siguiente te pueda amanecer con los zapatos bien brillantes en el set. Esas son dos virtudes necesarias y algo que hablamos (antes de entrar) en La revista fue que en cualquier momento, en cualquier última hora, o en cualquier momento que fuera necesario salir del set se iba a hacer. Creo que eso sea vuelto una obligación periodística y hay que estar preparado para todo”, asegura.

Además, explica que aunque parezca trillado, Multimedios “sí es una familia” y que ha sentido mucho apoyo de las también presentadoras María María Fernanda León y Paula Brenes, a quienes define como “mujeres maravillosas con las que he compartido solo risas, y mucho apoyo”. Además, añade que sus jefes, los camarógrafos y todo el personal lo han recibido con los brazos abiertos.

Capítulo cerrado

Si bien en el 2019 hablaba con mucha apertura sobre el cáncer testicular que superó, Sergio González confiesa que ahora es un tema del que no le gusta comentar mucho, pues lo ve como un capítulo cerrado en su vida.

Por salud mental prefiere concentrar su energía en otros temas, que lo hagan sentirse feliz, como la oportunidad que tuvo de tener una sección del programa Un nuevo día, de Telemundo.

“Siempre me termina preguntando y yo antes lo hablaba y tal vez afectaba, pero llega un momento en la madurez de uno dice ‘hasta aquí, ya tengo que cerrar este tema y tengo que darle paso nuevos capítulos’. Yo fui imagen de campañas, ayudé en lo que tenía que ayudar, pero creo que el capítulo terminó y tengo que darle paso a cosas buenas, porque uno no se puede quedar en el pobrecito. Y si me preguntan, claro que voy a responder, porque no se puede negar eso, pero ahora trato de no pensar o no estar tocando el tema de una enfermedad que es tan delicada para mí, era como autoflagelarme”, explica.

De hecho, asegura que es muy complicado cuando está frente a cámaras y le toca hablar sobre el cáncer.

“No creas, cada vez que me toca leer un texto en el noticiero o comentar una enfermedad, yo tengo que estar preparado para tocarlo, porque ahí va la salud emocional, incluidas las del cáncer y aunque no me encante, las tengo que hacer”, reconoce.

Sin embargo, el periodista asegura que aunque trata de abordar el tema lo menos posible, si le ha enseñado a ser mucho más agradecido por lo que tiene y por lo que es.

“Aprendí a dar las gracias, aprendí ser agradecido por esa confianza puesta en mí y por las oportunidades que le da a uno la vida. También me ha enseñado que uno debe dar lo mejor. Una enfermedad como estas te hacen madurar de inmediato, te permite valorar lo que es la vida, que tengo unos papás increíbles con los que vivo y a valorar más todas esas oportunidades.

“Uno valora cada minuto, cada cosa, cada instante; y yo sé que el 2020 y el 2021 han sido dos años muy complicados para la sociedad, pero yo no lo he visto complicado después de lo que me pasó. Creo que uno aprende a ver todo bonito, a sacarle el jugo a todo y por más duro que se ponga el momento, le ves algo positivo. Uno no puede vivir amargado y aprendí a que todos los días tengo que repasar lo bueno y lo malo que hice en el día y aunque siempre hace cosas malillas, ojalá que pese más lo bueno que uno ha hecho”, añade.

Ahora Sergio González concentra su energía en este nuevo capítulo que recién comienza a escribir y el cual espera este cargado de aprendizajes y anécdotas positivas.