Fabián Murillo no conoce la vergüenza, pero sí la determinación. El primer sentimiento nunca lo invadió pues sabía, cuando siendo un adolescente se topaba a quienes fueron sus compañeros de colegio, que él andaba ganando dinero dignamente.

Fabián tenía 16 años y pronto se convertiría en padre. Dejó el colegio cuando cursaba noveno. Para asegurar el bienestar de su hijo Esteban Murillo, él decidió vender confites y popis, luego con lo que ganaba compraba cremas y las ofrecía casa por casa. Con las ganancias compró una máquina y empezó a cortar cabello, luego trabajó en una pizzería. En cualquiera de sus labores, bajo el sol o la lluvia, él no dejó de pensar en su prioridad: su hijo, pero además, en su sueño: trabajar como imitador.

Luego de largas jornadas Fabián, quien luego concluyó sus estudios de secundaria, llegaba a su casa, en Barva de Heredia y no dejaba de practicar voces e imitaciones. A veces se acostaba a las 3 a. m., perfeccionando el talento que descubrió desde que tenía cinco años.

“Lo único que pensaba era en ir paso a paso. Vendía popis, llegaba todo quemado y tarde: me dormía de madrugada practicando. Ha sido de mucho esfuerzo. De constancia. De aprender que no siempre salen las cosas. Me he tenido que enfrentar a eso. Tengo 24 años y siento como si tuviera 50 por lo que he tenido que pasar. Nunca sentí vergüenza”, cuenta.

Fabián dice que las primeras veces se fue a escondidas a vender mientras su mamá, doña Yorleny Vindas, trabajaba todo el día. Luego, cuando ella se dio cuenta, le dijo que él contaba con su apoyo económico, sin embargo él insistió en hacer algo para asumir la responsabilidad de su hijo.

“Vengo de una familia humilde. Era una responsabilidad mía. Quería sentir que estaba luchando por mi hijo”, confía.

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Un talento en la televisión

El sábado 1.° de mayo Repretel estrenó su programa La Matraca, un espacio de humor y entretenimiento en el que canal 6 le presenta a la audiencia a la crema y nata de su elenco de humor. Entre las figuras destacan los nombres de Norval Calvo, Katherinne González, Edson Picado, Natalia Monge y Franklin Vargas, entre otros.

Fabián Murillo es una de las fichas de La Matraca. Repretel fue justamente la televisora que le permitió cumplir a este muchacho, de 24 años, su sueño de hacer humor en la pequeña pantalla. Como es usual, él no ha dejado de poner de su parte: luego de que un video suyo de imitaciones se hiciera viral a Fabián le hicieron un par de notas en Informe 11. Posteriormente Frederick Fallas, actual productor de La Matraca, le invitó a ser parte de El chapuzón, programa que se realizó en el marco de la eliminatoria para el Mundial de fútbol 2018.

En diciembre del 2017 lo volvieron a incluir en las transmisiones de toros: allí alcanzó mayor popularidad por su variedad de imitaciones, tiene más de 100, entre ellas la del polémico personaje de doña Genia, emulación de la señora Eugenia Cartín, quien posteriormente denunció a la televisora por imitarla. Finalmente Fabián y doña Eugenia limaron asperezas.

Fabián también fue participante de La dulce vida, espacio en el que presentó a Pepe un personaje propio. Ahora está de regreso.

“Es una buena oportunidad porque la pandemia ha estado dura para todos y los humoristas e imitadores estamos incluidos”, dice Fabián.

Personajes musicales

Si bien Fabián ha mostrado en sus redes sociales y en espacios televisivos los diferentes personajes que puede imitar de dibujos animados, así como de la espera deportiva y del mundo del entretenimiento, ahora innova con interpretaciones de los cantantes del momento.

En el estreno del programa de Repretel presentó a Camilo (cantante urbano colombiano) con el sonado tema Ropa cara. La imitación sonó muy similar y el propio Fabián se ha sorprendido de lo que puede lograr con práctica.

“En La Matraca vengo especializándome en personajes de música de género urbano. Además de Camilo tengo a Bad Bunny, Ozuna y Maluma, entre otros, la idea es sacar música nueva, nada vulgar. Quiero empezar a darme a conocer por medio de eso. Por eso empecé a sacar voces”, detalla Fabián, quien asegura que todos sus trabajos los hace con la mayor calidad.

“Camilo es un personaje al que saqué hace unos dos meses. Cada vez me suena mejor. Él canta muy agudo. Siento que fue un reto hacerlo. No cantaba así para nada. Me ha sorprendido. Quiero trabajar en Romeo Santos o Prince Royce”, añade el imitador, quien continúa con la consigna de ser el mejor ejemplo para su hijo Esteban, de ocho años.

La Matraca se puede ver los sábados por canal 6 a las 8 p. m. En su primer programa se estrenaron varios personajes, entre ellos la imitación que hace Natalia Monge de la artista nacional Debi Nova.