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Enseñar a los hijos la diferencia entre el bien y el mal puede ser muy difícil… Otras veces es imposible. Y este tipo de vicisitudes familiares son las que aborda la serie de estreno en Biography Channel, Las hijas del buen pastor, que muestra la vida de tres familias estrictas en asuntos de fe.
Los padres de estas familias son líderes y ejemplos en su comunidad, pero tendrán que enfrentarse a la rebeldía y el pecado en su propia casa, cuando sus hijas adolescentes empiezan a sentir las tentaciones de la vida adulta.
Tarea titánica
Como todas las jóvenes, Taylor, Olivia y Kolby, tienen conflictos con sus familias, se enamoran y deben aprender a manejar sus hormonas enloquecidas mientras cumplen con la vida cotidiana de un estudiante de segundaria.
Pero ellas tienen algo que no es tan típico. Sus padres son predicadores... ¡sí! Pastores de la Iglesia y, como es obvio, se espera que las familias de los hombres de Dios sean un ejemplo para la comunidad... ¿Cómo harán para respetar las tradiciones? ¿Podrán encontrar el equilibrio entre la tentación de todos los días y la presión de sus desconcertados padres?
El breve perfil familiar de cada uno de estos núcleos puede arrojar luz sobre qué tan complejo puede ser el escenario paterno de estos hombres de Dios...
Los Coleman
Ken es un pastor de la Iglesia Pentecostal de la Ciudad de los Refugiados con grandes remordimientos por los errores que cometió en la educación de sus hijos mayores.
Taylor tiene dieciocho años de edad, y trata de superar los límites establecidos por su estricto padre, quien pretende conservarla como su “angelito”.
Taylor quiere librarse de las reglas impuestas por sus padres y de vez en cuando, a escondidas de la mirada de su familia, besa a chicos y cae en la tentación, mientras trata de mantener la relación ante el Señor.
María es la madre de Taylor, y pone un poco de orden en la relación entre el padre y su hija, pero teme que la severidad de Ken impulse a Taylor a comportarse cada vez más rebelde. La joven está muy confundida con todo esto, y confía sus secretos a su hermanastra Kendra, quien fue expulsada por Ken cuando quedó embarazada a los 20 años.
Los Perry
Olivia, una joven de 18 años de edad, llevaba una vida de excesos: fiestas, drogas y alcohol. Pero todo cambió radicalmente cuando nació su hija. Desde entonces, Olivia trata de equilibrar su vida y comportarse como una buena madre soltera. Pero ella depende en gran parte de su familia y de su fe.
Mark y Cheryl son sus padres. Él es pastor y su esposa trata de imponer un enfoque práctico en la educación de sus hijas, basado en la oración en lugar de la disciplina.
La joven tiene dos hermanas mayores: Emily, quien trabaja como modelo en Los Ángeles y su estilo de vida la lleva a enfrentarse constantemente a la tentación, y Audrey (23), quien tiene una personalidad muy diferente y jamás pasó por una fase rebelde ni tuvo que enfrentarse a las mismas cosas que sus hermanas.
Los Koloff
Kolby tiene 16 años, es una amante de la diversión y siente curiosidad por muchas cosas. Está lista para empezar a salir con chicos, pero rápidamente descubre que no será tan fácil, pues no tiene uno, sino dos padres predicadores.
Su progenitor, Nikita, es un exluchador profesional que se convirtió en evangelista itinerante y a menudo da sermones en congregaciones de miles de feligreses. El está muy preocupado por lo que pueda pasar con la adolescencia de Kolby.
Por el otro lado está Victoria, la madre. Ella es la exmujer de Nikita y una predicadora cristiana que conduce un programa de radio basado en la fe.
Pero ahí no quedan sus servicios a la comunidad, pues también es la directora de dos centros de embarazo, donde realiza un acercamiento a los adolescentes, incluyendo a Kolby y a sus amigos, para hablar acerca de sexo.
Su hija usualmente pide consejos y apoyo tres hermanas mayores, Teryn (30), Tawni (28) y Kendra (20), sobre todo cuando se siente humillada por las muestras de autoridad de Nikita y Victoria.
Pero bueno, este es el recuento a grandes rasgos, porque ante las cámaras que siguen a estas familias, las muchachas mostrarán su verdadera personalidad, dudas, miedos y travesuras, y sus temas de conversación probablemente les pararán los pelos a sus papás.
Estos van mucho más allá de los besos que se prodigan a hurtadillas con muchachos de su edad: en los promos incluso se habla de las posibilidades de abortar, y más. Definitivamente, es un reto gigantesco el que tienen ante sí estos hombres del Señor.
