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En medio del temor que viven miles de latinoamericanos que residen en Estados Unidos, una mujer mexicana dio una muestra de valentía, aunque con su decisión, debió alejarse de su familia.
Luego de 36 años viviendo en tierras norteamericanas, Regina Higuera se autodeportó y regresó a su natal México antes de que las autoridades estadounidenses la obligaran a irse.
De acuerdo con La Nación de Argentina, la mujer vivía en Los Ángeles, California, y buscó la manera de regresar a suelo mexicano poco después de que iniciaran las protestas por las redadas migratorias del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE, por sus siglas en inglés).
Higuera cruzó la frontera el sábado 14 de junio de manera voluntaria. “Fue de las cosas más difíciles que tuve que hacer en mi vida. Les dije a mis hijas que no quiero que lloren”, aseveró la migrante mexicana a CBS News.
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El medio afirmó que la mujer tenía miedo de ser expulsada de Estados Unidos de manera imprevista.
Higuera dejó en Los Ángeles a su esposo, sus tres hijas y tres nietos.
La mujer llegó a Estados Unidos cuando tenía 15 años. Recientemente, trabajaba en una empresa textil, pero nunca logró resolver su estatus migratorio, agregó La Nación.
Las autoridades estadounidenses les ofrecen a los migrantes indocumentados la oportunidad de autodeportarse. Los interesados deben ingresar la solicitud por medio de una aplicación móvil llamada CBP One.
