La voz de Julián Garita, ahora Julián María en su nueva etapa como solista, vuelve a sonar en la música costarricense. El ex vocalista de la banda Magpie Jay estrenó hace unos días su tema Al agua, una canción introspectiva en cuya letra se revela mucho de la vida del intérprete y se muestra con una nueva visión.
Julián se fue a vivir a Nueva York, Estados Unidos, en el año 2021, dejando atrás su paso por la banda (donde estuvo desde el 2014). La decisión la tomó para estudiar y prepararse más en temas artísticos, pues es conocido que durante su trayectoria ha trabajado en danza, música, moda, estilismo y voguing; pero ahora le llegó el turno de cantar en solitario.

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De acuerdo con el también compositor, Al agua le funcionó como una catarsis para soltar sus miedos y expresarse con total libertad, sin temor al juicio social.
Antes de viajar, el cantante ya había dejado grabaciones listas. Durante ese tiempo había trabajado al lado de Felipe Pérez y Giancarlo Tassara en la producción de unas nueve canciones nuevas, de las cuales se grabaron seis.
“Al agua es una canción liberadora. Habla de una relación en pandemia, en la que había temas en los que yo no estaba completamente de acuerdo. Insistía en esa relación por una necesidad de compañía, aún sabiendo que no todo estaba tan bien”, explicó el artista sobre la composición.
Liberadora
En un comunicado de prensa, el artista expresó que nunca ha negado su sexualidad, pero con esta canción se abre completamente, ya que ha alcanzado una mayor confianza en sí mismo.
Sobre exponer públicamente su identidad queer (una identidad sexual o de género que no corresponde a las reglas establecidas de sexualidad y género), Julián dijo sentirse tranquilo y acuerpado por una gran parte del público que lo ha acompañado durante su historia.
“Fue ser muy honesto conmigo mismo. Felipe Pérez me acompañó en toda la parte de composición en la que había una vulnerabilidad que tuve que afrontar. Me sentí muy cómodo cuando escuché las canciones finalizadas”, explicó.
Sobre la recepción por parte de la audiencia, Julián expresó que puede que haya un sector que no conecte con la parte queer de la música, pero que aún así se siente motivado por las personas que sí lo hagan.
“Estoy muy ansioso por generar nuevas personas que conecten con la música desde este nuevo lugar, desde otra identidad y otras palabras”, dijo.
Proyectos
Julián volverá pronto a Estados Unidos a continuar su entrenamiento de danza en la prestigiosa escuela Peridance Center, de la ciudad de Nueva York. Además, en poco tiempo lanzará un disco corto con las canciones que ya tiene listas.

El artista, según explicó, es figura de la cultura del Ballroom en Nueva York y San José, ya que es parte de la casa Internacional House of Elle, donde comparte escenario con bailarines de distintas disciplinas e identidades.
Su carrera también incluye su trabajo como fotógrafo profesional, además de fungir como profesor de pilates y yoga.
Entre sus planes a futuro destaca regresar a Costa Rica para presentar su música en conciertos. “Más adelante me gustaría pensar en un disco de larga duración, seguir produciendo material, habrá también material audiovisual”, concluyó.
