Este jueves la productora Jogo confirmó en una conferencia de prensa a Juanes, Farruko, Nacho, Manuel Turizo y Piso 21 como los participantes del próximo Festival Picnic.
Para esta edición el festival se realizará en el Centro de Eventos Pedregal en Belén y será el 14 de abril desde la 1 p. m. y hasta la medianoche.
"Este es el proyecto más grande que tenemos durante el año y como todo festival siempre tratamos de hacerlo más grande", comentó Adrián Gutiérrez, director de Jogo.
Entre las novedades del año está que el festival tendrá un nuevo escenario, para un total de tres, y una nueva plaza de food trucks. En total, habrá 20 opciones de comida para los asistentes, así como zonas exclusivas en donde habrá variedad de tragos y bebidas.
Habrá seis actos internacionales y 10 nacionales, con variedad suficiente para generar impacto en distintas generaciones.

"Pensamos en artistas para gente joven como Manuel Turizo y Piso 21, que están bien pegados entre un público joven y otros artistas para jóvenes como de mi edad: Juanes y Tito el Bambino", manifestó Gutiérrez
"La idea que siempre hemos tenido es que la gente vaya más por el concepto de festival que por los artistas, pero quisimos darle opciones a todos", agregó.
Los organizadores esperan que el 16 de marzo salgan a la venta las entradas para el festival en distintos puntos, en cuenta el sitio web oficial del festival. Este se estrenará el 8 de marzo.
Habrá cuatro tipo de localidades. "Una entrada general que costará alrededor de ¢25.000; una entrada vip con Credomatic en la que se podrá tener una mesa reservada, con atención de Santos (bar y restaurante), en la que sólo habrá 1.500 personas (no se han revelado los precios); un área de Jogo para líderes e influenciadores de nosotros; y el Picnic Pass, que te dará acceso al frente de la tarima", detalló Gutiérrez.
Picnic inició en el 2015 como una apuesta para competir con los grandes festivales latinoamericanos que contratan DJs y bandas de rock, y poco a poco se ha enfocado más en el talento latino y tico.
Gutiérrez considera que esta es parte de la evolución que tienen todas las actividades que se plantean.
"Para asegurarnos el crecimiento nos propusimos hacer algo que le gustara a la gente y desde el 2016, que lo hicimos más latino, nos hemos encaminado hacia eso.
"El año pasado gustaron las bandas nacionales y creemos que los DJ no fueron tan relevantes, así que decidimos invertir todo en la experiencia de bandas y lo gastronómico", explicó el director de Jogo.
Según Gutiérrez, el festival ha crecido periódicamente. La primera edición, en el 2015, reunió a 4.000 personas y la última edición, del 2017, recibió 10.000 y agotó sus entradas rápidamente. Este 2018 esperan unas 15.000 personas.

