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La modelo brasileña Amanda Borges da Silva fue hallada muerta el pasado 1° de mayo en Japón, país que visitó para ser espectadora del Gran Premio de Fórmula 1; competencia de la que era seguidora.
De acuerdo con el medio japonés NHK, el cuerpo de Borges se encontró calcinado, luego de que el apartamento en el que se hospedaba fuera destruido por un incendio. Fue su novio quien alertó a las autoridades luego de que perdiera contacto con la brasileña.
Según los medios nipones, inicialmente se manejó la hipótesis de un accidente, pero ahora las investigaciones apuntan a que fue algo premeditado. Incluso, familiares de la víctima declararon en el canal brasileño TV Anhanguera que esta fue encontrada con signos de asfixia.
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Además, la cadena NHK también indicó que ya fue detenido un hombre por el caso, que aún es una incógnita. Se trata de un hombre de Sri Lanka de 31 años, apresado dos días después bajo la acusación de abandonar el edificio sin apagar el fuego.
Amanda Borges da Silva era modelo e influencer, tenía 30 años y era fanática de la Fórmula 1, especialmente del piloto británico Lewis Hamilton. En su perfil de Instagram se describía como Máster en Letras.
El 30 y 31 de abril compartió las últimas historias de su viaje por suelo nipón, en el que se encontraba desde principios de ese mes.
