
El reverendo Mark Edwards, vicario anglicano de la iglesia de St Cuthbert’s, de Newcastle; investigó las declaraciones de Meghan y su esposo Enrique, en las que los duques de Sussex afirmaron que se casaron tres días antes de su boda pública.
Los esposos le contaron a Oprah Winfrey, en una entrevista polémica y muy reveladora, que se habían jurado amor eterno de manera privada.
De acuerdo con una publicación del Daily Mail, Edwards explicó que la afirmación ha causado confusión entre el clero y las parejas que se quieren casar, pues ahora algunas están solicitando que sus bodas sean privadas. Por ese motivo le pidió a Justin Welby, arzobispo de Canterbury, que aclare la situación.
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Edwards, quien afirma que ha recibido muchas solicitudes de bodas privadas, hizo la consulta a la oficina del arzobispo. Quería obtener respuestas sobre la legalidad de casar a las parejas en privado, sin testigos, ni licencias. Ante las consultas que hizo recibió la siguiente respuesta: “(El arzobispo) Justin tuvo una conversación privada con la pareja sobre la boda, en el jardín, pero le puedo asegurar que no se celebró ninguna boda hasta el evento nacional televisado”.
Desde que Meghan y Enrique contaron que se habían casado en secreto, los vicarios ingleses han puesto en duda dicha afirmación, ya que las reglas de la iglesia de Inglaterra requieren al menos dos testigos y público para que se puedan presentar objeciones, explica Daily Mail.
Meghan le dijo a Oprah que el enlace privado se llevó a cabo tres días antes de la boda televisada (19 de mayo del 2018). “Nadie lo sabe. Pero llamamos al arzobispo y le dijimos: ‘Mire, esto, este espectáculo es para el mundo, pero queremos nuestra unión entre nosotros’”.
La reina está triste

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En otras publicaciones, tanto el Daily Mail, como The Sun, informaron que una fuente interna del palacio de Buckingham les confirmó que la reina Isabel II no está molesta por la entrevista, pero sí triste.
“Ella no está enojada, solo está triste. Siempre se han preocupado por él (Enrique) y la reina se siente muy protectora con él. Siempre intentaron apoyarlo cuando apareció Meghan”, dijo la fuente.
Tras la entrevista con Oprah, el palacio de Buckingham, en nombre de la reina, informó que realizarían una investigación privada sobre las declaraciones de la pareja, en las que entre otras cosas afirmaron que un miembro de la familia real estaba muy preocupado por el color de piel que tendría Archie (el primogénito de los duques de Sussex) al nacer.
