¡Matemos la fiebre!
Lugar: Mundo Aventura, en paseo Colón. Teléfono: 2221-6934.
Lugar: Eskalar, en Pavas. Teléfono: 2220-4448.
Lugar: La Montaña del Sapo y La Culebra, en Patarrá de Desamparados. Teléfono: 2274-2440.
Lugar: Gimnasio Profitness, ubicado dentro del centro comercial Paseo de las Flores, en Heredia. Teléfono: 2263-1111.
Lugar: Asociación Altitude, en Turrialba. Teléfono: 8952-2308.
Lugar: Explornatura Adventure Travel, en Turrialba. Teléfono: 2556-6070.
Una conocida frase anónima cita que “El cielo es el límite” y al menos para los escaladores –de profesión y de corazón–, eso es bien cierto.
Para ellos, no hay roca que logre intimidarlos o desviarlos de su propósito: llegar a la cima de la montaña… o del rocódromo .
¿Del qué? Sencillo: para este gremio, eso es una instalación preparada específicamente para practicar la escalada, sin tener que movilizarse hasta la montaña. En otras palabras, son paredes –de todas las formas y tamaños–, que tienen agarres artificiales que simulan roca natural, pero que están al alcance de todos.
En Costa Rica se pueden encontrar rocódromos en gimnasios o sitios especializados, que están ubicados dentro y fuera de la capital.
Gran abanico. Si de lugares hablamos, podríamos hacer una gran lista; así que por opciones, usted no se preocupe. ¡Hay para escoger!
Uno de los sitios más conocidos se ubica frente al Gimnasio Mundo Aventura , en paseo Colón. Con sus puertas cerradas, pareciera ser uno más; pero, al entrar, se puede ver el mundo tan diferente que se vive ahí.
Un salón amplio, lleno de paredes verticales y horizontales y colchonetas en el piso (para que la persona que se caiga no se golpeé tan duro), es lo que lo recibirá en ese local.
El propietario es Daniel Guevara, quien asegura que el objetivo es darles a sus clientes las herramientas necesarias para que conozcan lo básico (y más) sobre la escalada.
“Nosotros nos manejamos por sesión, nos gusta que la gente que venga aprenda algo diferente en cada clase, por llamarlo de alguna manera. La primera visita está acompañada de una inducción, para que se empiecen a familiarizar con el rocódromo”, explicó Guevara.
Una vez que entran en confianza, les presentan las paredes a los nuevos visitantes. “Hay de varios niveles: tenemos para principiantes, las que son verticales, y avanzados, las que tienen inclinaciones de 45°, 70° y las que son completamente horizontales”.
“Todo es un proceso. Las más difíciles son las inclinadas porque el peso del cuerpo se va hacia el piso, pero eso es una sensación que enseñamos a controlar”, agregó
En cuanto a los accesorios, él enumeró varios aspectos importantes: “Los zapatos deben ser especiales y la ropa debe ser muy cómoda. Acá se le da el magnesio (polvo para las manos) y el arnés, en caso de que lo necesite”.
Si usted está interesado en ingresar a este gimnasio, Guevara apuntó que tienen una membresía que cuesta ¢25.000. “También hay una sesión de un día con un valor de ¢3.000”.
El gimnasio Profitness , ubicado dentro del centro comercial Paseo de las Flores, en Heredia, también da la opción a sus clientes de escalar en una pared especial.
Carlos Arroyo, administrados del local, apuntó que su objetivo es aprovechar lo llamativo que es este deporte para incitar a las personas a hacer ejercicio.
“La gente se aproxima y escala y escala. A la gente le gusta y, lógicamente, que nosotros tomamos todas las previsiones del caso para evitar algún accidente. Aquí enseñamos técnica y alentamos a la gente para que la utilice, ya que es obvio que por el esfuerzo que se hace, bajan también de peso y se tonifican”.
En Pavas, San José, el gimnasio Eskalar llevó, desde hace un año, el mundo de la escalada a otro nivel. “Nosotros nos dedicamos más a lo deportivo, a crear gente apasionada por esto. Acá damos sesiones de calidad, más que de cantidad”, mencionó su dueño Julio Arce.
Según dijo, para inscribirse debe hacer primero una prueba que vale ¢5.000, si la pasa tiene tres opciones de pago. “La primera es que pueden pagar ¢40.000 todos los meses y se le da el equipo y pueden venir cuando quieran; la segunda es que pueden pagar una matrícula anual de $50 y, por mes, ¢30.000, y acá se le da el equipo; por último, pueden pagar ¢30.000 y traer su propio equipo”.
Por su parte, Isabelle Torres, del centro recreativo La Montaña del Sapo y La Culebra , en Desamparados, comentó que allí tienen una pared de escalar y para poder utilizarla, los interesados deben de formar un grupo de 50 o más personas y pagar, cada uno, ¢7.400.
“Es bien interesante porque se pueden poner dos cuerdas y hacer algún tipo de competencia entre los visitantes. Eso da para mucha diversión”, mencionó. Agregó que para subir al rocódromo solo deben traer ropa cómoda. “Acá damos el arnés, las cuerdas y el casco”.