
God of War, una de las franquicias más queridas por los usuarios de la PlayStation, estrena su nueva aventura esta semana.
Si a usted le gustan los videojuegos y tiene un PlayStation 4 probablemente tiene esta fecha marcada en su calendario, incluso hasta con el dinero apartado ($60) para disfrutar de este título. Pero para los que son ajenos al mundo de los controles y no entienden porqué tanto alboroto, aquí va un resumen sobre God of War.
Esta saga es protagonizada por Kratos, un imponente guerrero espartano que obtuvo el poder del Dios de la guerra griego, Ares. Con sus nuevas habilidades Kratos se convierte en un sirviente de los dioses, quienes lo engañan para matar a su familia.
Hasta ahí, la historia parece una de las tragedias griegas clásicas. Sin embargo, el guerrero, en su condición de deidad, decide abrir la caja de Pandora (literalmente) para derrocar a los dueños del monte Olimpo.
Así arranca un viaje épico en el que Kratos borra del mapa a figuras heroicas como Perseo, Teseo y Hércules –no sin antes acabar con otras criaturas mitológicas como la Hidra,el Kraken y Medusa–. Fue un largo camino que se narró a lo largo de ocho videojuegos hasta terminar con la destrucción de Zeus, Poseidón, Hades y Hermes.

La saga parecía haber concluido en el 2010 con el estreno de God of War III. Sin embargo la expectativa renació en el 2016, cuando Sony mostró un adelanto de la nueva entrega en la E3 (la convención más grande de videojuegos celebrada anualmente en Los Ángeles).
Este teaser mostraba a un Kratos viejo, barbudo y acompañado de un pequeño. Esta vez el fantasma de Esparta se encontraba vagando por las montañas escandinavas enfrentando a los dioses de la mitología nórdica.
Nadie esperaba ese ambicioso crossover de mitologías y, más importante aún, ni el más letrado de la saga podría explicar cómo hizo Kratos para pasar del Olimpo a las puertas del Valhalla.
Fueron dos años cargados de hipótesis, teorías de fans y artes conceptuales para alimentar la expectativa, que por fin culmina este viernes. La espera fue larga e incierta pero el fantasma de Esparta regresó para alborotar a la industria del entretenimiento electrónico.
¿Cómo es el nuevo videojuego?
Viva tuvo la oportunidad de jugar esta nueva entrega una semana antes del lanzamiento. Después de una campaña que se prolongó por más de 30 horas, usted lector puede estar seguro que esta entrega de God of War no solo está a la altura de sus predecesoras, sino que las supera y con creces.
God of War presenta un apartado gráfico impresionante, el cual se ve aún mejor en el PlayStation Pro que proyecta una resolución a 4K. Además, el estudio Santa Mónica se arriesgo en cambiar las mecánicas y la narrativa de las entregas anteriores.
La saga del Dios de la Guerra destacó desde su inicio por pertenecer al género de los hack n’ slash (como Devil May Cry o Dante's Inferno) es decir, tenía un estilo rápido y frenético que anteponía la fiereza antes que la planificación. En ese entonces, Kratos estaba armado con dos espadas cortas amarradas con cadenas a sus antebrazos – era bien heavy metal–. El videojuego premiaba al jugador si este lograba conectar 50 o hasta 200 golpes seguidos sin recibir daño.
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Este modelo de dinámicas cambió radicalmente: ahora Kratos está armado con un hacha y un escudo. Estas herramientas cambian radicalmente el estilo de juego, pues ahora el jugador deberá planear mejor sus movimientos antes de lanzarse a la ofensiva para conectar "combos".

El hacha es una herramienta versátil que sirve para golpear a los enemigos, obvio, pero también puede ser arrojada a los adversarios y puede regresar de manera inmediata, similar al martillo del Dios Thor (Mjölnir).
Hay un término en el diseño de videojuegos que se llama kinestésica, el cual se utiliza cuando el título transmite una sensación al jugador por medio de sus acciones. Para que este elemento tenga efecto se debe lograr una sinergia entre el movimiento, el sonido y la imagen. God of War hace esto de una manera muy eficaz, sobre todo en el combate.
Las peleas está tan bien diseñadas que cada golpe se siente visceral, e incluso, el control tiembla cada vez que el filo del arma choca contra algún metal. Pero el hacha no es solo es para pelear, sino que también es una herramienta para resolver acertijos y evadir trampas para hacerse camino por el peligroso reino de Midgard.
Kratos también puede utilizar los puños para defenderse o el escudo para desplazar a un adversario y así ganar espacio para asestar un golpe decisivo.
Otro de los elementos que cambia es la incorporación del pequeño hijo de Kratos, Atreus, quien no solo es espectador sino que será de vital ayuda para que su padre pueda hacerle frente a los dueños del Valhalla. El primogénito del Dios de la Guerra, podrá lanzar flechas a la distancia y aprovechará cualquier oportunidad para ayudar.

En el camino Kratos y Atreus encontrarán tesoros como armaduras, gemas y runas que ampliarán el repertorio de movidas. Esta dinámica añade elementos de RPG (role playing game, juegos de rol como Final Fantasy o Dragon Age) para customizar el personaje y el estilo de juego.
Por ejemplo, hay ciertas combinaciones que favorecen los encuentros a corta distancia, otras en cambio mejoran considerablemente la magia o la defensa. Este elemento motiva la exploración y a la realización de misiones secundarias, de las cuales hay un montón.
God of War mezcla muchas ideas y mecánicas que se han utilizado en otros videojuegos, como, por ejemplo, los encuentros contra los jefes se parecen a los de la saga Dark Souls. Los niveles están separados por puertas que solo se pueden abrir con una herramienta que se encuentra en otro nivel, ese estilo de juego es muy popular entre títulos Metroidvenia como Metroid Prime y Hollow Knight.
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La historia
Este God of War es bastante diferente a los anteriores no solo por los elementos jugables sino por el mismo personaje.
Kratos era un personaje cuya motivación era la venganza, el odio y eso se reflejaba en su manera violenta, sanguinaria, de eliminar a sus enemigos, en su forma de caminar y hasta de hablar.
Pero en esta ocasión, el fantasma de Esparta está en una búsqueda para cumplir una promesa que le hizo a su esposa fallecida .Además, Kratos está en la obligación de ser un tutor para Atreus , que en múltiples ocasiones le recuerda que la fuerza no solo viene del músculo, sino de la mente.
Todo esto para que el pequeño no cometa los mismos errores de su padre .
“Creo que como todo, los hijos a veces reflejan lo peor de nosotros. Es lo que vemos como un espejo y eso a veces nos entristece. Pero creo que lo peor y lo mejor de Kratos están ahí en Atreus. Y Atreus también generará algunos de los mejores atributos en Krato”, explicó el director de Santa Monica, Cory Barlog, a una entrevista realizada por PlayStation.
El pequeño es el único que entiende el lenguaje de los nórdicos y su participación en la historia es vital para entender todos los elementos que giran alrededor de los nueve mundos de esta mitología.
La manera en la que se complementan estos dos personajes en el recorrido es sublime. Hay una verdadera evolución en cada uno, el Kratos al que empieza es muy diferente al que lo termina, los mismo se puede decir del mismo Atreus.
En resumen. God of War es una demostración de lo que se puede alcanzar en un videojuego no solo a nivel narrativo sino en sus mecánicas.
Completar la historia principal del juego puede tomar alrededor de 25 horas sin contar las misiones secundarias, las cuales podrían agregar otras 30 horas a esta experiencia que se coloca como una de las mejores de esta generación y un claro ejemplo hacia lo que otras obras deben apuntar.
El fantasma de Esparta volvió como los grandes, como lo merece.
