
Berlín. EFE. Cada cierto tiempo hay algún investigador con nuevas teorías sobre los mitos de la estética contemporánea. Ahora es el turno de Rita Wildgans y Hans Kaufmann, quienes vienen con la novedad de que Van Gogh no se cortó la oreja, sino que la perdió en una pelea con Gauguin.
La oreja de Van Gogh. Paul Gauguin y el pacto del silencio , es el título del libro, que ofrece una nueva versión de los hechos ocurridos en Arles (sur de Francia) en 1888.
Los autores argumentan a partir de una serie de dudas que apartan la versión aceptada de los hechos, repetida hasta la saciedad.
La base de esa versión, según el libro, es el testimonio dado por Gauguin a la policía. Según esa versión, Van Gogh, en un ataque de locura, se habría cortado la oreja izquierda con una navaja de afeitar y luego había ido con ella a un burdel para entregársela a una prostituta y encomendarle que la cuidase.
Wildgans y Kaufmann consideran que la historia está llena de detalles difíciles de creer que les llevan a la conclusión de que Gauguin mintió a la policía, para disimular el papel clave que había tenido.
La versión alternativa parte de un enfrentamiento entre los dos amigos, generado por la decisión de Gauguin de abandonar Arles y regresar a París.
En el enfrentamiento en una calle, Gauguin habría desenfundado su daga y le habría cortado de un tajo la oreja a Van Gogh, no lejos del burdel donde posteriormente aparecería la misma y desde donde la policía siguió un rastro de sangre que la llevó hasta la famosa “casa amarilla” donde vivían Van Gogh y Gauguin.
“Usted calla y yo también lo haré”, fueron las últimas palabras de Van Gogh a Gauguin, lo que es interpretado por los dos investigadores como un pacto de silencio.