
Un amable lector se extraña de que en un editorial de La Nación aparece el adverbio de modo desafortunadamente , inexistente en nuestra lengua porque no lo registra el DRAE.
Nuestro idioma posee una enorme cantidad de adverbios de modo que se forman con el femenino de cualquier adjetivo calificativo (incluidos participios verbales) más el elemento compositivo de sufijación mente : claramente, amablemente, curiosamente, lógicamente, hábilmente, definitivamente... y un larguísimo, interminable etcétera.
Pero resulta que el DRAE (inexplicablemente) no registra todos esos adverbios. Por ejemplo: Jurídicamente está; antijurídicamente no está. Desgraciadamente está en la actual edición 22.ª del DRAE , pero no se registra en la anterior. Tampoco se encuentran, entre otros muchos, elogiosamente , desenfrenadamente , despreciablemente , inteligentemente ... El DRAE registra moralmente , pero no inmoralmente ; recoge desaseadamente , pero no aseadamente ; presenta incomprensiblemente , pero no comprensiblemente ; exhibe desacertadamente , pero no acertadamente ; contiene interesadamente , pero no desinteresadamente ... Y así ad náuseam.
El colmo: cuando las gramáticas (incluida la de la RAE y el Esbozo ), exponen que estos adverbios en -mente pueden llevar tilde en el primer elemento, según las normas generales del uso del acento, suelen poner como ejemplos cortésmente , hábilmente y alegóricamente (acento agudo, grave y esdrújulo); pero resulta que el DRAE no registra ni cortésmente ni alegóricamente . ¿Increíble?
Efectivamente (vamos al punto del problema del lector), el DRAE , hasta el momento, no registra desafortunadamente ; sí, en cambio, recoge el antónimo afortunadamente y el sinónimo infortunadamente . (¿Valdrá la pena un “salacuartazo” por aquello del trato discriminatorio?).
Pero la ausencia de desafortunadamente en el DRAE no implica que este vocablo no “exista” pues su formación y uso, en cualquier caso, son totalmente correctos (prefijo negativo des , adjetivo femenino afortunada y sufijo adverbial de modo mente ).
Desafortunadamente se me acabó el espacio.