Tras un año de permanecer cerrada por remodelación, la Sala Precolombina del Museo Nacional reabre sus puertas para exhibir al público costarricense y extranjero sus joyas arqueológicas.
El espacio remozado da la bienvenida a los visitantes con un diseño museográfico más atractivo y moderno, que busca unir el aprendizaje y el entretenimiento.
La Sala Precolombina fue cerrada temporalmente en agosto del 2008 debido a serios problemas de filtraciones y comején en el techo, que ponían en peligro las valiosas piezas de la colección.
Aventura arqueológica. Con una inversión total de ¢47 millones, el remozamiento de la sala incluye reparaciones en el techo, un nuevo sistema de iluminación, un cambio de color en la pintura de sus paredes y un diseño museográfico más dinámico para apreciar las piezas arqueológicas en todo su esplendor.
También se hicieron mejoras en el aspecto gráfico al diseñar afiches grandes con información puntual sobre los diferentes temas de la exposición y unificar las cédulas con una sola tipografía.
Según explicó la museógrafa del Museo Nacional, Lidilia Arias, el nuevo guión exhibe cerca de 800 piezas que ofrecen un recorrido cronológico por las diferentes etapas de nuestra historia precolombina, desde los primeros grupos que habitaron el territorio costarricense (10.000 a.C) hasta el período de contacto con los españoles en el siglo XVI.
“Todas las piezas se limpiaron, algunas se restauraron y se les dio una distribución más ordenada en las vitrinas, para que la gente pueda observar todos sus detalles y comprender la función que les dieron nuestros antepasados indígenas. Se incluyeron tres piezas grandes en piedra de la zona de Diquís, que anteriormente no se habían exhibido”, detalló Arias.
Algunos de los hitos de la exhibición son las puntas de lanza y otras herramientas de piedra lasqueada, los metates rituales, las misteriosas esferas gigantes, delicados adornos de jade y oro como colgantes, orejeras y bastones y varios objetos ceremoniales utilizados en sus prácticas rituales.
También se encuentra información sobre la división social, los ritos funerarios, la relación entre los ornamentos y las jerarquías sociales y la relación entre los animales y el mundo espiritual.
Aprender y jugar. Los visitantes más jóvenes tendrán a su alcance una herramienta novedosa para hacer un recorrido más provechoso y divertido por la sala precolombina. El Museo Nacional y la empresa Editorama trabajaron conjuntamente en el diseño y publicación de una guía didáctica dirigida al público infantil. Las guías se distribuirán gratuitamente entre los niños y niñas que visiten la exposición.
“La publicación lleva el título de Aventura arqueológica y está diseñada para incentivar a los niños a acercarse al patrimonio arqueológico de una manera entretenida, creativa y lejos de esa visión tradicional que presenta la visita a los museos como algo aburrido”, explicó el arqueólogo y educador Mínor Castro, responsable del contenido de las guías.
Desde la primera página la guía desafía a los pequeños a jugar a ser arqueólogos para descubrir el modo de vida de los primeros costarricenses.
“Queremos incentivar entre los niños y niñas la capacidad para observar formas, detalles, colores, diseños para que puedan conocer por medio de los objetos arqueológicos a las personas que los crearon y utilizaron”, agregó el especialista.
A partir de textos breves, dibujos y fotografías, la guía desarrolla temas como los períodos de la historia precolombina, la forma de vestir y decorar el cuerpo que tenían los indígenas, la organización social, el trabajo, la alimentación, la arquitectura y las ceremonias religiosas. Cada apartado va acompañado de actividades lúdicas como sopas de letras, crucigramas y juegos que incentivan el aprendizaje entretenido.