
Buenos Aires. EFE Para conmemorar el centenario del nacimiento de Ernesto Sábato, su familia puso en marcha esta semana las obras que restaurarán la casa del escritor, en la que falleció en abril, para convertirla en un museo.
A menos de dos meses de cumplir 100 años, Sábato falleció el pasado 30 de abril a causa de una bronquitis que debilitó su frágil estado de salud, que le había obligado a recluirse en su residencia de Santos Lugares, en las afueras de Buenos Aires, donde pasó la mitad de su vida y escribió sus más importantes obras.
“La casa está muy deteriorada. La idea es recuperarla como estaba en el esplendor de la casa y en el esplendor, creativo y vital, de mi padre” , explica Mario Sábato, hijo del escritor, al recordar que esa vivienda en la que creció fue construida por el cineasta italiano Federico Valle, quien la usó como su estudio de cine. “Valle nos alquiló la casa con él adentro. Convivió con nosotros durante años” , dijo.
“Es una estancia bien curiosa, con un estilo indefinido. Don Federico hizo un sótano para quedarse a vivir con nosotros, y luego amplió toda la parte de atrás, donde mi padre tuvo el estudio de pintura y escribió sus últimos años (...) Es un lugar como tocado por una varita. Antes había vivido allí dos años exiliado el escritor brasileño Jorge Amado”, concluyó.