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El costo en dólares de un mísero segundo de la saga de El Señor de los Anillos , unos $9.000, era equivalente “al presupuesto que, en 2003, tenía el Estado para apoyar nuevos proyectos del cine tico”.
Al menos así lo asegura María Lourdes Cortés, directora de Cinergia, fondo de apoyo cinematográfico que esta semana celebró una década de impulsar sueños y dar soporte a decenas de iniciativas fílmicas de Centroamérica y Cuba.
Precisamente, aquella paupérrima situación del Centro de Cine, llevó a Cortés a poner su renuncia como directora de esa organización y buscar soluciones a la enorme escasez de dinero. Así nació Cinergia, que con el pasar de los años ha inyectado más de $1 millón a la causa audiovisual de la región.
“Cuando dirigía el Centro de Cine, nos quedaban al año como $9.000 para apoyar lo nuestro. Una miseria, una pobreza. Me sentía con las manos atadas y fue cuando decidí salir de esa institución para emprender una nueva forma de conseguir fondos”, dijo Cortés.
Los frutos son notables en tan solo 10 años. Cinergia ha impulsado más de un centenar de filmes –muchos coronados con reconocimientos internacionales– y formado a gran cantidad de realizadores.
Desde sus inicios, el sostén de Cinergia fue el fondo holandés Hivos , el primer donante; luego, se robustecería con aportes de la Fundación Ford, el fondo Hubert Bals, la Universidad Véritas y varias alianzas estratégicas.
La cinta local El último comandante , que se estrenó en el 2010, fue el proyecto que recibió el apoyo más importante en la primera convocatoria de Cinergia, en 2004. En ese momento, el filme se llamaba El rey del cha cha chá y obtuvo $25.000 en la categoría de posproducción.
“Cinergia llegó con el entusiasmo de los que tienen coraje, sacudiendo la convicción de los creadores, ¡provocando sueños! Gracias porque hoy podemos decir que Centroamérica existe en el mapa mundial del cine”, expresó Isabel Martínez, codirectora de El último comandante, en una dedicatoria dirigida al cumpleañero fondo.
Otros $15.000 que Cinergia otorgó en el 2007 a El último comandante para su posproducción, terminaron de impulsar el estreno de la película y, con ello, la obtención de premios internacionales, entre los que se destacan el mejor guion en el Festival de Cine de Trieste (2010) y el mejor guion y fotografía en el Festival Ícaro Centroamericano (2010).
El proyecto de Martínez es solo un ejemplo del “ojo” que tiene Cinergia a la hora de elegir las obras que apoya, pues de 150 proyectos impulsados, 120 han cosechado premios internacionales.
“Nuestra mayor inversión es en el jurado; tratamos de traer los mejores profesionales, con buen ojo, pues nos preocupa premiar proyectos que vayan a dar la talla a nivel internacional”, agregó Cortés.
Donald Ranvaud , productor de filmes como Ciudad de Dios (2002), es muestra de la calidad de profesionales que han integrado el jurado.
Entre los galardones obtenidos bajo el padrinazgo de Cinergia, destacan el de filmes cubanos como Juan de los Muertos , que este año obtuvo el premio Goya a la mejor película iberoamericana; y Viva Cuba , que ganó el Gran Premio Ecran Junior del Festival de Cine de Cannes (2005).
“Cinergia siempre ha sido el primer impulso, el paso decisivo para emprender cada proyecto... No solo con el apoyo financiero sino con formación. Lo más cercano que tenemos a un fondo de apoyo al cine cubano es precisamente Cinergia”, expresó Alejandro Brugués, director de Juan de los Muertos.
Por si fuera poco, los filmes Princesas Rojas (2013), de Laura Astorga, y El camino (2008), de Ishtar Yasin, lograron estrenarse en el Festival de Cine de Berlín, mientras que Agua fría de mar (2009), de Paz Fábrega, logró conquistar el Tigre VPRO del Festival Internacional de Cine de Róterdam ( 2010).
También, el fondo se ha convertido en un semillero de talentos. Para muestra, un botón: al guatemalteco Julio Hernández, el fondo lo apoyó en sus inicios otorgando $25.000 a Gasolina , su ópera prima. A sus 38 años, él se ha consolidado como cineasta y guionista y en su primeras cuatro películas, ha conquistado 44 premios internacionales.
“Cinergia es un reducto, un búnker, un acorazado, casi un inhalador para el asma durante mi primera cinta, y un acompañamiento para las otras”, expresó Hernández.
Recuento. Cinergia ha otorgado $858.000 en apoyos directos y $265.000 en talleres y becas.
Además de inyectar dinero por medio de sus convocatorias anuales, el fondo ha organizado 27 talleres internacionales, en los cuales han participado 364 realizadores.
En definitiva, las alianzas estratégicas con el Rotterdam Lab (Holanda), el TyPa (Argentina), Bolivia Lab y Morelia Lab le han facilitado a Cinergia la conformación de una mayor oferta de beneficios para los realizadores de la región.
Al cabo de una década, Cortés asegura que su principal reto es convencer el público de que es sano y satisfactorio consumir cine nacional. “Es bueno para la salud de nuestra cultura”, es el lema de Cinergia.
Por último, trabajar en nuevas ayudas para el mercadeo de los filmes y la captación de recursos de capital privado son ahora la prioridad de Cinergia.
