
Apenas un año después de su intento fallido de escalar el monte Everest, el reconocido chef Daniel Vargas volvió a emprender la aventura este mes de mayo. No obstante, una vez más, su sueño de conquistar el pico más alto del mundo se vio truncado.
La persona que maneja las redes sociales del chef, mientras este se encontraba en el Everest, informó que “la montaña no quiso”, por lo que el grupo en el que escalaba Vargas ya comenzó el descenso hacia una zona segura.
Según las redes de Daniel, esto se debió a que en el campamento 4 (que es de paso) los atrapó una fuerte tormenta, que hizo imposible el ascenso por la falta de oxígeno y el clima tan adverso.
A diferencia de esta ocasión, que obedece a causas externas, en 2024, el chef tuvo que abandonar la escalada por problemas de salud.
“Llegué al campamento 1 sintiéndome muy mal. Hace tres días me dio una infección viral, por eso dejé de postear en redes sociales”, relató en su momento entre lágrimas.
Los médicos le diagnosticaron un leve edema cerebral causado por la infección. Le recomendaron descender de inmediato a Katmandú, la capital de Nepal, para recibir tratamiento.
Luego de ese trago amargo, Vargas compartió con entusiasmo que se preparó mejor, y que incluso se entrenó con una cámara hipóxica para mejorar su aclimatación y evitar complicaciones en la altitud.
“Ya estoy metido en la cámara hipóxica. Varias personas me han preguntado en qué consiste esto. Esta cámara simula los niveles de oxígeno a distintas alturas. Llega a un máximo de 6.500 metros. La idea es llegar hasta ahí, pero debo aclimatarme poco a poco”, explicó en un video publicado en Instagram.
