Un funcionario de Acueductos y Alcantarillados (AyA), de apellidos Torres Torres, quedó inhabilitado de su cargo durante cuatro meses, ya que se le investiga como sospechoso de cobrar dádivas a cambio de acelerar trámites.
De acuerdo con el informe preliminar del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Liberia, el sospechoso, de 39 años, trabajaba en la sede del AyA en Liberia, como encargado de tramitar permisos para conexión de agua en viviendas y terrenos.
El martes 5 de mayo, un cliente se presentó a dicha institución para solicitar la conexión del servicio de agua por primera vez para un terreno. En apariencia, ese día Torres le habría solicitado ¢25.000 para agilizarle el trámite.
Al conocer la denuncia y luego de realizar varias diligencias, los investigadores del OIJ detuvieron al sujeto el lunes 25 de mayo en una vía pública del centro de Liberia y lo pusieron a las órdenes del Ministerio Público.
La Fiscalía Adjunta de Liberia confirmó que, a solicitud de ese despacho, el Juzgado Penal ordenó la medida cautelar de suspender cuatro meses del cargo a Torres, quien habría cometido los hechos como funcionario del AyA, en Liberia. Esa medida vence el 25 de setiembre próximo.
A partir de los hechos y las pruebas, el caso sería elevado a juicio y el sospechoso se expone a penas de hasta ocho años de prisión, según el artículo 355 del Código Penal, que tipifica el delito de concusión.
“Se impondrá prisión de dos a ocho años al funcionario público que, abusando de su calidad o de sus funciones, obligare o indujere a alguien a dar o prometer indebidamente, para sí o para un tercero, un bien o un beneficio patrimonial".
De acuerdo con la Fiscalía, “se cree que Torres habría estado cobrando un monto económico a algunas personas usuarias, para facilitarles una serie de trámites en dicha institución, por lo que se le abrió una investigación penal, la cual corresponde a la causa 20-001132-060-PE”.
Los agentes del OIJ indicaron que si alguna otra persona de Liberia o lugares cercanos fue víctima de hechos similares, interponga la respectiva denuncia o llame al Centro de Información Confidencial, a la línea 800-8000-645.
El mes pasado dos policías fueron detenidos en Pococí por cobrar “mordidas” a personas que irrespetaron la restricción sanitaria vehicular.
Un día después, a ambos se les suspendió del cargo como sospechosos de concusión, tal y como lo solicitó la Fiscalía de Pococí al Juzgado Penal de esa localidad.
Los hombres, de apellidos Gutiérrez Obando y Campos Bermúdez, fueron detenidos en la delegación policial en la que laboraban.