Lo que en mayo del 2014 fue inaugurado como una promesa de auxilio para familias de la Ciudadela 25 de Julio en Hatillo centro, San José, terminó en sitio de consumo de drogas y generador de violencia.

Por esa razón, maquinaria de la Municipalidad de San José bajo supervisión de la policía municipal, redujo a escombros la estructura la mañana de este lunes.
Se trata del antiguo Centro de Cuido y Desarrollo Infantil (CECUDI), sitio que fue tomado por la organización delictiva Los Lara, como punto para desarrollar sus actividades ilícitas. La misma suerte corrió el viejo salón comunal que estaba en el corazón de la ciudadela como Aguantafilo.
“El CECUDI y el salón comunal de la 25 Julio fueron vandalizados por los habitantes de la calle y venían operando como búnker. Hace 15 días, derribamos otro búnker en la 25 de Julio en una propiedad que era el Banco Popular. Ya tenemos una orden de derribo para una casa que es del IMAS, igualmente usada como un búnker; esa la vamos a derribar a finales de la próxima semana y, la semana pasada, botamos los camerinos del estadio de Sagrada Familia”, explicó el jefe de la policía municipal de San José, Marcelo Delgado.
Aguantafilo, María Reina, Sagrada Familia y Alajuelita han sido escenarios de hechos violentos al sur de la capital, como ajustes de cuentas, accionamientos de armas y ventas de drogas.
Los hechos más recientes ocurrieron la noche del domingo en Sagrada Familia donde un joven de 23 años, identificado como Derek Moisés Ramírez Palacios, falleció tras recibir disparos en la cabeza y el tórax mientras estaba en vía pública junto a otro hombre y, la madrugada del lunes, en Hatillo 1, fueron atacados con arma de fuego dos sujetos de apellidos Benavides y Barrantes.
Las balaceras y asesinatos en esa parte de la capital están asociadas con las disputas entre los grupos criminales de los Lara y los Myrie. Cada organización tiene sus aliados según el segmento de interés.
Policialmente, se sabe que, en la Ciudadela 25 de Julio, dos sujetos administran los puntos de venta de droga que están dominados por los Lara. También, se conoce de un colombiano, alias Eros, radicado en Medellín, quien desde esa ciudad gira órdenes sobre el ilícito negocio.

