Los ocho tripulantes de la lancha Yerelin D, aprehendidos el 10 de diciembre a unas 500 millas náuticas de la costa Pacífica con 900 kilos de cocaína ya se encuentran tras las rejas.
La fragata norteamericana que los capturó el 10 de diciembre, debía cumplir otras misiones de vigilancia antes de acercarse a la costa Pacífica de nuestro país para proceder a la entrega.
Los costarricenses fueron identificados como de apellidos Aguirre, Lezama, Sánchez y Fuentes, este último con antecedentes por robo agravado y desobediencia a la autoridad, además de tener una orden de captura pendiente por robo agravado.
De igual manera dos nicaragüenses residentes, de apellidos Estrella y Ruiz, además de un ecuatoriano de apellido Valencia y un guatemalteco apellidado Barahona quedaron con los ticos en prisión preventiva a la espera del juicio. Podrían afrontar penas de hasta 20 años de cárcel por tráfico internacional de drogas.
Los ocho recibieron en el barco militar estadounidense alimentación, ropa y traslado, mientras que la lancha en que llevaban la droga fue hundido.
Todos fueron llevados hasta la estación del Guardacostas de Caldera a fin de transportarlos hasta la ciudad capital, donde serán procesados por el presunt
Gracias a los alcances del Convenio de Patrullaje Conjunto entre Costa Rica y Estados Unidos, el jueves 18 fue el transbordo del barco estadounidense a la patrullera costarricense. Tuvo lugar a las 4. pm. en la entrada del Golfo de Nicoya, Puntarenas. En octubre una operación similar tuvo lugar en el Pacífico.
Agentes antidrogas y autoridades del Ministerio Público recibieron a los sospechosos junto con una muestra de la droga.