
La defensa de un ciudadano italiano, detenido en Jacó en julio pasado, rechazó que esta persona que tiene más de 30 años de radicar en Costa Rica tenga nexos con una organización criminal de Calabria, Italia, como lo señaló la Policía Internacional (Interpol).
La manifestación la hizo el abogado José Miguel Villalobos Umaña, luego de revisar la documentación enviada por autoridades de Italia en la cual solicitan la extradición de Franco D’Agapiti, de 74 años, para someterlo allá a un proceso penal.
“Se indicó que el gobierno de Italia lo pide en extradición porque, supuestamente, pertenece a una mafia calabresa con tentáculos en Albania y en Argentina y en otros países. Absolutamente falso. La extradición no es por eso. La extradición no indica nada de que Franco D’Agapiti pertenezca a una agencia mafiosa.
“La extradición lo está pidiendo por una causa que apenas esta investigación en Italia (...) la solicitud se refiere únicamente a una tentativa de exportar 50 kilos de droga a Italia desde Costa Rica, sin localizar ni la droga, ni el dinero, ni el plan, ni los supuestos cómplices”, dijo el defensor.
Villalobos explicó que como el delito es una tentativa de tráfico de drogas, se opondrá a la extradición, pues esa supuesta acción delictiva atribuida a su representado puede ser delito en Italia, pero no es sancionada penalmente en Costa Rica. “El tratado de extradición vigente exige que el hecho atribuido debe ser delito en ambos países”, afirmó.
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Franco D’Agapiti llegó a Costa Rica a finales de la década de los ochenta. Se estableció en Jacó en la cantón de Garabito, Puntarenas y es propietario del hotel casino Amapola.
Según Migración y Extranjería este ciudadano italiano registró cerca de 17 entradas y salidas de suelo costarricense entre los años 2010 al 2015. A partir de enero del 2016 no se registran movimientos migratorios.
Acusación
Franco D’Agapiti fue detenido el 22 de julio pasado por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) luego de que se girara una orden de captura emanada por la Interpol.
La acción policial se desarrolló porque D’ Agapiti, presuntamente, es representante en nuestro país del clan Belloco, un subgrupo de la ’Ndrangheta, que es una organización criminal de Calabria, Italia, según detalló un comunicado de prensa de la Interpol emitido en Lyon, Francia.
Supuestamente, su papel en nuestro país era “facilitar el envío de cocaína hacia Italia, utilizando su red y hotel para proporcionar apoyo logístico a las personas visitantes del clan”.
Ese mismo 22 de julio fueron detenidos otros cinco integrantes de la denominada ’Ndrangheta en Albania y Argentina.
Según la Interpol, todas las personas se encontraban en fuga luego de que en noviembre del 2019, la policía italiana dieron un duro golpe a la ’Ndrangheta. En esa ocasión, en una operación llamada Magma 2007, se arrestó en Italia a 45 personas.
Descargo
José Miguel Villalobos dijo que todos los señalamientos hechos por las autoridades contra su representado son falsos.
“Franco D’Agapiti tiene más de 30 años de vivir en Costa Rica. No es un prófugo de la justicia italiana. Durante casi todos los años iba a Italia, entraba y salía. No puedo entender como alguien que es prófugo de la justicia entra y sale por los aeropuertos oficiales y nadie lo detiene”, añadió.
Sobre el supuesto nexo con la mafia calabresa, dijo que en los documentos de extradición no se hace referencia a ese grupo criminal.
“La extradición solo la piden por una cosa, que en el año 2018 una persona de apellido Fonti, investigada en Italia, vino a Costa Rica, supuestamente, a buscar una persona que le sirviera de contacto para enviar droga a Italia.
“Se aloja en el hotel Amapola por tres o cuatro días. Fonti es enviado por un señor de apellido Ferro. Esta persona Ferro conoce a Franco.
“Según los hechos, Ferro manda a Fonti para que se contacte con Franco, para que le sirva de contacto para conseguir, vea es hasta risible la cantidad porque hasta eso ponen en el documento, para buscar 50 kilos de drogas”.
El abogado dijo que a pesar de que las autoridades italianas tienen los teléfonos intervenidos y las grabaciones fueron transcritas, no consta en la documentación incorporada al expediente “ninguna conversación entre Fonti y Franco, no hay fotos, ni ninguna referencia de que se reunieron.
“Ferro unos días después le hace una llamada a D’Agapiti y, curiosamente, no le hace ninguna referencia de la visita de Fonti (...), conversan sobre la posible venta del hotel y en esa conversación se transcribe una frase: ’está muy difícil’. Pues las personas que interpretan las grabaciones dicen que es lenguaje cifrado para decir: ’está muy difícil conseguir los 50 kilos de droga’.
“Lo que Franco recuerda de esa frase es que (Ferro) le pregunta si la venta del hotel va adelante o no y él le contesta, bueno, eso está muy difícil”.
José Miguel Villalobos dijo que en este supuesto trasiego de droga no se presentó ningún elemento probatorio que señalaran que la droga se envió o fuera decomisada.
Por el momento, Franco D’Agapiti permanece en prisión preventiva durante dos meses, que vencen el 23 de setiembre. Precisamente, ese es el lapso que tiene el gobierno italiano para presentar toda la documentación para justificar la extradición.
En este asunto, Italia ya no podrá imputar nuevos delitos a D’Agapiti. Tendrá que mantener solo el tentativa para el tráfico de drogas. El caso se está tramitando el Juzgado Penal de Quepos.
