
A las 8 a. m. de este jueves, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) regresara al botadero clandestino de Cachí, en Cartago, para reconstruir el lanzamiento del cuerpo de Allison Bonilla Vásquez.
La información la confirmó a este medio Francisco Herrera, abogado del único imputado en este caso, un agricultor apellidado Sánchez Ureña (alias Sukia, de 28 años).
Dicha diligencia la realizarán pocos días después de que se confirmara que los restos óseos encontrados en ese botadero efectivamente pertenecen a Bonilla, de 18 años y quien estaba desaparecida desde el 4 de marzo pasado.
Según dijo Herrera, la intención de esto consiste en conocer, en detalle, la caída que sufrió la joven, luego de ser lanzada.
“Mañana, el OIJ va con dirección funcional de la Fiscalía para lanzar el cuerpo, que supongo yo será una especie de maniquí. El objetivo es saber qué dirección toma. Mi intención es pedir, en algún momento, de dónde venían los vientos para esas fechas y las circunstancias que tienen esos tiempos, porque no es lo mismo hablar de marzo y abril y de octubre, que es lluvioso.
"Pero, el asunto es que esta es una diligencia bastante interesante, porque vamos a conocer la caída, vamos a conocer la magnitud de todo lo que supuestamente sufrió el cuerpo”, apuntó el defensor.
Antecedente
El caso de la desaparición de la joven trascendió el 4 de marzo, cuando fue vista por última vez cuando se dirigía a su casa, en Ujarrás. En ese momento, le envió un mensaje a su novio para decirle que “dos pintititicas” la venían siguiendo.
Después de eso, no se supo nada de ella. Días después de su pérdida de rastro, se encontraron unos lentes y su cédula, pero no había mayor indicio que explicara qué había ocurrido.
No fue hasta setiembre que se tuvieron nuevas noticias sobre este caso, cuando detuvieron a Sánchez Ureña, de 28 años y conocido como Sukia. En su declaración, él confesó el crimen al indicar que la había violado antes de matarla.
Su cuerpo, añadió, estaba en el botadero clandestino en Cachí.
Sin embargo, justamente un día después de ese hallazgo, Sukia rindió una ampliación a su declaración inicial, en donde cambió la versión y aseguró que él no le hizo “daño alguno a esta joven”.

