
San Isidro de Grecia. La Fiscalía de Grecia abrió una pesquisa en contra de Juan Pablo Delgado Chavarría, el supuesto "vidente" del "santuario de la mujer vestida de sol", por agresión con arma de fuego, daños y usurpación .
La jueza Andrea Rojas lo puso en libertad, pero le prohibió "perturbar, amenazar o intimidar a la ofendida o cualquiera de sus familiares".
A Delgado lo denunció Alicia Selva Treviño, una estadounidense -exmiembro de la secta- que a mediados del 2004 desertó tras ser atacada por una turba, según consta en su denuncia.
Ayer, en compañía de la Fuerza Pública, la extranjera tomó posesión de la casa que edificó a escasos 50 metros del "santuario", en San Isidro de Grecia.
El inmueble, de dos pisos y construido con madera rústica de ciprés (valorada en unos ¢25 millones), está dentro de la propiedad del grupo religioso, pero la vivienda está registrada a nombre de Selva, educadora pensionada.
Petición "divina". Selva, nativa de Texas, Estados Unidos, pretendía habitar en esa comunidad -creada por la Asociación de los Mensajeros de la Mujer Vestida de Luz- con su familia.
Un desacuerdo con Delgado la habría llevado a enfrentarse con los miembros de la comunidad.
El "vidente" -detalla la denuncia- comunicó a la educadora que "por mandato de la Virgen" tenía que depositar $4.500 (¢2,1 millones), al haber cometido un supuesto pecado de soberbia.
Selva no accedió a la petición, lo que, según la denunciante, despertó la ira de Delgado.
Ella asegura que a raíz de esa situación una noche -en julio del 2004- el "vidente" se presentó a su vivienda para lanzar piedras y patear las puertas.
Al no obtener respuesta, el encartado habría regresado con otras personas que atacaron la casa. La norteamericana asegura que tuvo que escapar por los cafetales.
Temerosa de nuevas agresiones, Selva regresó a Texas, pero volvió para denunciar lo ocurrido.
Orden de captura. En varias ocasiones la Fiscalía requirió la presencia de Juan Pablo Delgado.
"Lo fuimos a buscar varias veces, pero en el santuario siempre nos decían que no estaba; se mostraban herméticos", contó el jefe cantonal de la Fuerza Pública, Marvin Quesada.
Al "vidente" lo detuvieron el lunes pasado cuando se movilizaba por La Victoria de Grecia en un lujoso vehículo de la secta.
Ayer La Nación intentó conversar con Delgado. El acceso al santuario no fue permitido y el empleado de la entrada (dijo llamarse Frank Teotokos) indicó que el "vidente" hablaría el viernes.
Las autoridades judiciales no informaron por qué le abrieron una causa por agresión con arma.
Cumplido el trámite de devolución de la casa, con presencia de la Policía, la educadora Selva tomó en la tarde un vuelo que la llevó de regreso a Estados Unidos.