Dos remolinos, también conocidos como tolvaneras, demonio de polvo o torbellinos menores, fueron grabados en las últimas horas por agricultores del distrito de Palmira en Zarcero y Bomberos de Liberia, Guanacaste.
El más reciente ocurrió este martes en medio de un repollal en Zarcero, provincia de Alajuela, donde agricultores vieron, en media faena, una nube de polvo que comenzó a girar poco a poco en el suelo hasta tomar dimensiones de unos 30 metros o más. El fenómeno duró más de 20 segundos en un punto casi fijo, con ligeros movimientos de traslación y una acelerada rotación.
Óscar Castillo, del Cuerpo de Bomberos, tuvo una experiencia similar durante la atención de un incendio agrícola en Liberia, Guanacaste, el fin de semana.
La preparación de un terreno se salió de control y las llamas consumían varios puntos de la maleza por lo que se alertó a Bomberos.
De repente una columna giratoria de llamas y humo comenzó a ganar fuerza de rotación y a desplazarse en un diámetro de unos 15 metros, pero con una altura considerable.
El calor intenso del incendio y los vientos turbulentos en la zona generaron el fenómeno, que llamó la atención de apagafuegos y finqueros.
Según Daniel Poleo, experto del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), los días calurosos, con temperaturas por encima de 35 grados Celsius en varias regiones, generan estas tolvaneras.
Explicó que el calentamiento de la tierra, junto con los vientos alisios, crea un pequeño sistema de baja presión que hace circular el viento en forma de remolino, fenómeno muy común en la temporada seca en Guanacaste, el Pacífico y algunos puntos del Valle Central.
Añadió que suelen durar desde pocos segundos hasta dos o tres minutos como máximo, y a veces alcanzan alturas de 12 metros o más.

