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El hecho de que el martes se dieran cinco incendios forestales, dos de ellos muy graves, y que en total resultaran afectadas unas 500 hectáreas, preocupa a las autoridades.
La alerta surgió pues el país está bajo los efectos de fuertes vientos (entre 40 y 76 km/h), las temperaturas son altas y los terrenos están muy secos.
Luis Diego Román Madriz, coordinador del Programa de Lucha contra Incendios Forestales del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), y Héctor Chaves León, director de los Bomberos, coincidieron en pedir a la población que evite realizar quemas durante lo que falta de la Semana Santa.
Casos. En cuanto a los hechos más recientes, ocurrieron en Lomas de Barbudal, Bagaces; San Pedro de Cóbano e isla Venado (ambos de Puntarenas); el cerro Chompipe, entre Orotina y Garabito; y en un charral cerca del aeropuerto Daniel Oduber, en Liberia.
El que mayor afectación provocó es el del cerro Chompipe, donde se estima que las llamas llevan consumidas cerca de 400 hectáreas de bosque secundario (hay plantaciones de mango) y pastizales. El fuego fue controlado el martes, pero el fuerte viento lo reactivó ayer y, todavía al cierre de esta edición, se continuaba con las labores de extinción.
Igualmente, este miércoles se estaban controlando los últimos focos de llamas de un incendio en isla Venado. Precisamente, este fuego lo ocasionaron niños que estaban jugando con fósforos. Los menores estaban cazando pericos en el bosque, actividad que es considerada como una tradición para los pobladores de la isla durante los Días Santos.
En isla Venado ardieron 70 hectáreas de bosque y pastizales.
Otro incendio forestal del martes se inició con la quema de charrales en los alrededores del aeropuerto Daniel Oduber. La alerta empezó a las 10:22 a. m. y se extendió hasta las 2:40 p. m., cuando se dio por controlado. El humo obligó a cerrar la terminal durante casi dos horas.
