Lo que comenzó como una discusión entre dos adolescentes de 17 años, terminó en un violento ataque con arma blanca que tiene a uno de ellos en condición delicada en el Hospital de Guápiles, Limón.
El incidente ocurrió este viernes en el cantón de Pococí, cuando ambos jóvenes participaban en una actividad en la zona. Según informó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), por razones que aún no están claras, los menores empezaron a discutir, lo que rápidamente escaló a los golpes.
Una mujer adulta que se encontraba en el lugar intentó intervenir para separar a los adolescentes. Fue en ese momento que uno de ellos extrajo un puñal y atacó al otro, hiriéndolo en la zona de las costillas.

El joven herido fue trasladado de emergencia a la clínica de Pococí y posteriormente al hospital local, donde permanece bajo observación médica debido a la gravedad de la lesión. Mientras tanto, las autoridades judiciales mantienen el caso en investigación.
Otro hecho violento
Este hecho ocurre apenas unos días después de otro caso similar que conmovió a los vecinos de Turrialba. La noche del pasado domingo, un menor de 16 años, identificado con el apellido Vega, fue atacado en la plaza de su barrio, San Juan Norte.
“El incidente habría iniciado por una aparente broma entre los dos jóvenes, quienes se conocían y solían compartir en el vecindario”, relató Gaudy Loaiza, tía abuela del joven fallecido, en declaraciones a La Nación. “No tengo idea de quién es el otro muchacho… lo que nos dijeron es que se hicieron una broma y el otro se enojó y fue cuando se dio la agresión”.
El ataque ocurrió pasadas las 9 p. m., a escasos 500 metros de la vivienda del fallecido. Vecinos alertaron a los familiares y el joven fue llevado de inmediato al Hospital William Allen, donde murió horas más tarde.
Vega era hijo único y vivía con su madre, quien recibía apoyo de la familia en el cuido del adolescente mientras ella trabajaba. Desde pequeño mostró una fuerte afición por los caballos.
“Desde los cuatro años aprendió a andar en caballo porque le encantaban, era un chiquillo bueno…”, relató su tía abuela, visiblemente conmovida.
De acuerdo con cifras del OIJ, en lo que va del año Costa Rica registra 380 homicidios, de los cuales 26 corresponden a personas menores de edad.
