Siete abogados defensores de varios imputados por el asesinato de los primos Jorge Humberto Barboza, conocido como Bambam, y Carlos Alberto Barboza, pidieron al Juzgado Penal de Heredia que se califique como “testigos sospechosos” a dos jóvenes clave en la investigación del doble crimen ocurrido en febrero del 2024 en el bar Dude’s, ubicado cerca de la Universidad Nacional.
La solicitud fue planteada durante una audiencia de anticipo de prueba realizada el pasado 2 de abril, según pudo constatar La Nación mediante el video de dicha diligencia.
Los testigos, de apellidos Mendoza y Blandón, prestaron declaración como parte del proceso penal 25-000983-0059-PE.
Gracias al testimonio de estos testigos, las autoridades lograron reconstruir cómo ocurrió el doble homicidio de los primos Barboza, que fueron encontrados en una fosa de 1,6 metros. Carlos fue apuñalado 66 veces mientras dormía en la barra del bar, recibiendo heridas mortales y golpes en la cabeza. Su primo Jorge también fue atacado y murió por una profunda herida en el cuello que le cortó la arteria carótida.
En la audiencia los testigos volvieron a declarar, no obstante, previo a su testimonio, los defensores Roberto Carmona (representante de un imputado de apellido Bravo Díaz), Raised Peraza Morales (Cerna Villamil y Rodríguez Rivera), Yensy Herrera (Postome Téllez), Diego Alfaro (Jean Franco Segura Gómez), Rafael Rodríguez (Palacios García), Esteban Córdoba (Rodríguez Pastrán) y Marco Vindas (Díaz Álvarez), argumentaron que ambos testigos estuvieron presentes durante los hechos, por lo que “existe una probabilidad de participación” en los homicidios.

¿Qué es un ‘testigo sospechoso’?
La figura del testigo sospechoso ha sido reconocida en resoluciones judiciales como la Resolución Nº 165-2021 del Tribunal de Apelación de Sentencia Penal de Cartago y el voto nº 2018-00767 de la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia.
Según esos criterios, un “testigo sospechoso” es aquella persona sobre la que recae una leve sospecha de participación en un hecho punible, pero sin elementos suficientes para iniciar una acusación formal. Aun así, esta calificación les otorga las mismas garantías que a un imputado, como el derecho a abstenerse de declarar y a contar con defensa técnica.
LEA MÁS: Una risa, dos muertes y un congelador: el relato del testigo clave en el crimen de primos en Heredia
‘Amigos del grupo’
Durante la audiencia, el defensor público Carmona afirmó que los dos testigos eran amigos cercanos de los imputados y estuvieron en el bar Dude’s el 7 de febrero, día en que se cometió el doble homicidio.
“Estuvieron ahí con los imputados, eran amigos de uno de los considerado líder de ese grupo (Jean Franco Segura) y resulta que ellos muy fácilmente observaron la situación, se fueron para sus casas, pasaron varios días sin que ellos, voluntariamente se apersonaran a decir qué habían observado, sino que ellos callaron esa situación. No fue que vinieron voluntariamente a ayudar a la policía, sino que tuvieron que buscarlos y, a criterio de esta defensa (...) deciden hacer el relato que consta en las investigaciones y que fueron simples observadores (para no ser imputados)”, expresó Carmona.

De acuerdo con los defensores, esa actitud genera dudas sobre su papel en los asesinatos, ya que no actuaron de inmediato para colaborar con la investigación y más bien se alejaron del sitio.
La defensora pública Peraza Morales añadió que ambos testigos no solo estuvieron presentes el día de los hechos, “sino que posteriormente se presentaron al bar Dude’s”, siendo que “ellos se presentaron días después al lugar donde había ocurrido el homicidio”.
LEA MÁS: Asesinato de primos en Heredia: esto revela el perfil psicológico del principal sospechoso
“Eso genera una leve sospecha de que participaron en los hechos delictivos que se atribuyen a los demás imputados”, agregó Peraza.
Así mismo destacaron que a estos testigos se les decomisó sus celulares durante la investigación.
Es una ‘ficción jurídica’
Contrario a lo expuesto por los defensores, la representante del Ministerio Público, María Pérez, recalcó que, conforme al artículo 2 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, las competencias para calificar a una persona como testigo o imputado son atribuciones exclusivas del Ministerio Público.
Pérez recordó que, históricamente, la jurisprudencia y la doctrina en derecho penal han sostenido que el llamado testigo sospechoso “es una ficción jurídica”.
La fiscal también aclaró que el Ministerio Público no actúa de forma arbitraria al determinar la condición de una persona dentro del proceso.
“Aquí se ha indicado por parte del licenciado Carmona ‘que se les decomisó el teléfono a uno de ellos’. No solo se le decomisó a uno de ellos sino que se le decomisó el teléfono a Mendoza y Blandón, también se le decomisó el teléfono a otros que están involucrados en este proceso, justamente porque en aquel momento venía iniciando una investigación de unos hechos sumamente gravosos por los cuales se desconocía cómo habían acontecido", enfatizó la fiscal.
Pérez detalló que, en efecto, estas personas estuvieron presentes la madrugada del 7 de febrero en el bar Dude’s,sin embargo, sostuvo que el peso de las pruebas recabadas ha permitido individualizar a otros como responsables.
“Quiere decir entonces que cada uno de los testigos que se encuentren en la pluralidad de situaciones delictivas que se dan en el país, se tiene que considerar como testigos sospechosos porque estuvieron presentes en un evento delictivo”, refutó ante lo planteado por los defensores.
Además, Pérez recalcó que ningún informe o en entrevista del OIJ, así como del Ministerio Público se menciona a Mendoza ni a Blandón como partícipes.
Los abogados Esteban Córdoba y Rafael Rdríguez confirmaron a La Nación que el juzgado rechazó la solicitud planteada por la defensa y no se les declaró como testigo sospechosos.
