EscucharEbony Morales Barrantes, una joven madre de 29 años, que se ganaba la vida vendiendo ropa y postres, fue asesinada en Las Brisas de Toro Amarillo, en Guápiles, Pococí, el 10 de octubre de 2018, cuando otra mujer la atacó a balazos. Este diciembre, seis años después del crimen, la familia cerró el capítulo judicial de esta dolorosa pérdida, cuando la única sospechosa fue condenada a 12 años de prisión.
La madre de Ebony, doña Miriam Barrantes, falleció en 2022 mientras esperaba que la justicia llegara para su hija, según relató Greivin Rodríguez, hermano de la víctima. De acuerdo con el hombre, de 49 años, además de este terrible “golpe”, su madre había enfrentado otra tragedia en 2017, cuando otro de sus hijos también fue asesinado.
El pasado jueves 19 de diciembre, el Ministerio Público divulgó que Mónica Thomas Rojas, de 31 años, fue condenada por el Tribunal Penal de Pococí por un delito de homicidio simple, en perjuicio de Ebony, quien era mamá de tres hijos.
Aunque doña Miriam ya no está para cerrar el proceso, los demás allegados de Ebony celebran que, finalmente, el caso concluyó.
“Creemos que el proceso se demoró y lamentablemente la que más interesada estaba era mi mamá. Ella murió esperando la sentencia, pero en buena hora que llegó el momento de que ella reciba la condena que le dieron. Estamos contentos, pero esperamos que ese aspecto mejore, para que los tiempos de espera sean más cortos”, cuestionó.
Mónica Thomas, la sentenciada, es madre de cuatro menores de edad. Según Greivin, lamenta que tanto los hijos de su hermana, como los de Thomas, sufran las consecuencias del crimen. Sus sobrinos, por ejemplo, no han podido crecer juntos, dos de ellos, de 11 y 9 años, hijos de un mismo padre, están con su abuelita paterna y la mayor, de apenas 15 años, con su otra abuela por parte de papá.
“Nos sentimos muy a gusto por la resolución. Se lo merezca o no se lo merezca, fuera un error o no, las cosas no tenían que darse de la forma en que se dieron”, agregó Rodríguez.
Ebony, ‘una mujer que no se dejaba’
El hermano de Ebony relató que el día del homicidio, en octubre del 2018, él se encontraba en San Carlos, Alajuela. Al recibir la noticia, no lo podía creer. Ella era la consentida de la familia, pues era la única mujer entre cinco hermanos. “Mi hermana no se dejaba y tenía mucho carácter. Antes de eso, en al menos dos ocasiones, tuvo problemas, pero nunca llegaron a esos extremos”, compartió Greivin.
Según el hermano, aparentemente, Mónica mantenía una relación con una expareja de Ebony, lo que originaba conflictos entre ellas. “Discutían por teléfono y el día del homicidio, ella (Mónica) llegó a buscar a mi hermana a la casa”, relató.
Greivin narró que en ese momento comenzó una riña. En determinado punto, Thomas se acercó al carro en el que llegó, presuntamente un taxi informal, sacó un arma de fuego y disparó hasta asesinar a Ebony. La muchacha sufrió heridas en el cuello y el pecho con un revólver calibre .380. Aunque fue trasladada con vida al Hospital de Guápiles, murió poco después de su ingreso.
La acusada estuvo en fuga durante ocho días, hasta que se entregó en la Fiscalía Adjunta de Guápiles el 18 de octubre de 2018.
En su memoria y en su corazón, Ebony siempre ocupará un lugar especial. Greivin la recuerda como una mujer completamente dedicada al bienestar de su familia, que siempre encontraba la manera de cubrir las necesidades básicas de sus hijos con sus emprendimientos. “Siempre decía que quería que sus hijos tuvieran una calidad de vida mejor que la que ella tuvo”, concluyó.
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Desde el 2018 a la fecha, según las estadísticas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), 684 mujeres fueron asesinadas. Ellas representan el 7,8% de los 4.715 homicidios acumulados en seis años.
