EscucharDos hermanos, identificados como Gersan Nicola Vargas Rodríguez y Pavel Jordany Vargas Rodríguez, de 22 y 25 años, murieron baleados en el bar La Cima, en San Josecito de Alajuelita, la noche del sábado. Ambos eran hijos de Eduardo Vargas Quesada, un reconocido músico de este cantón e integrante de Los Vargas Brothers, un grupo de rock de gran trayectoria.
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Según la versión preliminar del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), las víctimas estaban en el local compartiendo con otros amigos cuando llegaron dos sujetos en moto. El acompañante se bajó, se dirigió a Jordany Vargas y abrió fuego. Su hermano intervino y también fue baleado. Cuando la ambulancia llegó, ambos estaban fallecidos; uno presentaba una herida en el cuello y el otro, en el abdomen.
Junto a ellos, había otras dos personas que resultaron heridas. Una de ellas es Ana Luisa Rodríguez Mora, de 49 años, madre de los dos fallecidos, quien resultó con un impacto en la mano izquierda, y un varón de apellidos Piedra Mesén, de 21 años, quien sufrió una herida en el abdomen. Ambas personas fueron trasladadas al Hospital San Juan de Dios. Piedra es soltero, sin hijos y vecino de Poás de Aserrí.
Los hechos ocurrieron a las 11:19 p. m. y, de momento, se desconoce el motivo del asesinato. La Fuerza Pública desplegó un operativo para tratar de localizar a los motociclistas que ejecutaron el tiroteo, pero no fue posible encontrarlos.
La Sección de Inspecciones Oculares y Recolección de Indicios del OIJ levantó los cuerpos la madrugada de este domingo y recolectó indicios balísticos en el local, los cuales fueron enviados a laboratorios forenses. Ahora las pesquisas buscan obtener videos de locales o casas cercanas que permitan identificar a los responsables del doble homicidio.
Celebración anticipada de cumpleaños terminó en balacera
Sherry Vargas Rodríguez, hermana de las víctimas, dijo que su madre y los hermanos menores andaban en el bar porque Jordany cumpliría 26 años el 19 de julio y, junto con un amigo, le celebraron por anticipado.
Afirmó que a Gersan le gustaba ir a ese bar porque había una mesa de billar y le encantaba ese juego. Dice que ambos trabajaban en un supermercado y que Jordany había salido hace poco de prisión.
Añadió que ella tenía una relación cercana con ambos. Gersan llevaba dos meses viviendo con la mamá en San Juan de Dios de Desamparados. Él quería comprarse una moto a fin de año para enseñarle a manejar a su hermano Jordany. Este último vivía en Poás de Aserrí, donde residía con su compañera y su hija de seis años.
Sobre su madre, Sherry dijo que el disparo le comprometió la muñeca izquierda y está a la espera de una valoración para tratar de salvarle la mano; de lo contrario, podrían tener que amputarla. En cuanto a Piedra Mesén, el amigo de los fallecidos que también fue baleado, afirmó que está estable.
Para Eduardo Vargas, de 65 años, padre de los fallecidos, ha sido un golpe muy fuerte y, según Sherry Vargas, como es un hombre muy creyente, les ha dicho que deja todo en manos de Dios. Afirmó que la familia espera velar a sus hermanos la noche de este domingo y que mañana serán las honras fúnebres en la iglesia católica de Poás de Aserrí.
Alajuelita es el cuarto cantón con más homicidios del país, solo superado por San José, Limón y Puntarenas. Con este doble asesinato suma 22 casos en poco más de medio año que ha transcurrido del 2024.
El caso más reciente ocurrió el pasado jueves en la terminal de buses de Concepción, donde mataron a un hombre de apellido Mena, baleado en el tórax y los brazos.
