EscucharTres hombres murieron baleados la madrugada de este domingo y cinco resultaron heridos en una balacera durante una fiesta clandestina en una bodega, en Guápiles, en el cantón limonense de Pococí. El tiroteo ocurrió a las 2:43 a. m. en un local situado a un lado de la ruta 32, un kilómetro al oeste de la entrada principal a la ciudad.
Tras recibir la alerta, la Fuerza Pública y socorristas de la Cruz Roja encontraron a seis personas ilesas en el lugar y un hombre fallecido en el suelo a unos 40 metros de la bodega; tenía impactos de bala en la parte posterior de la cabeza y en el tórax. Este hombre fue identificado como Bernol Enrique Flores Villalobos, de 25 años y vecino de Guápiles.
Los testigos dijeron a las autoridades que había más heridos, los cuales fueron trasladados en carros particulares al Hospital de Guápiles, donde se confirmó que ingresaron seis personas, de las cuales dos de ellas fallecieron.
La Policía Judicial identificó a uno de los fallecidos en el hospital como Antony Guillermo González Cruz, de 26 años. Este hombre, aunque era oriundo de Pococí, vivía en Horquetas de Sarapiquí y aparecía como tesorero en una sociedad anónima, que no tiene bienes.
El tercer fallecido es Ariel Alexánder Cubillo Solano, de 30 años, y también vecino de Guápiles. En la página que Cubillo tiene en Facebook, dice que desde hace seis años es propietario del gimnasio Iron Training, situado en el centro de Guápiles. Asimismo, Ariel Cubillo anteriormente había formado parte de la Banda Comunal de Pococí.
En cuanto a los heridos, uno fue identificado como Jefferson Rivera Stuart, de 25 años, jugador del equipo de fútbol Municipal Grecia, quien sufrió balazos en las extremidades inferiores.
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Sobre los otros afectados, las autoridades mencionaron que son de apellidos Rodríguez Sánchez, de 20 años, y Acuña Barrera, de 25. Ambos están internados en el Hospital de Guápiles.
Otro hombre de apellidos Arias González, de 20 años, recibió un herida en la espalda y fue trasladado al hospital San Vicente de Paúl, en Heredia. Finalmente, una mujer no identificada sufrió una lesión en una rodilla producto del desorden ocasionado por el tiroteo.
Como parte de las acciones policiales, se ubicó un vehículo en la urbanización Sinaí en el cual se observaron rastros de sangre. La Policía ubicó ese carro pues informes confidenciales señalaron que, después de la balacera, el automotor llegó a ese sitio y descendieron varios sujetos que se introdujeron en un apartamento.
Por el momento, no se tiene claro el móvil que generó la balacera, pero no se descarta que pueda ser un ataque hacia alguna de las personas fallecidas. Asimismo, trascendió que la fiesta había sido promovida por redes sociales, pero no se detalla la ubicación exacta del lugar donde se iba a efectuar. También, pedían a los asistentes que llegaran en taxi.
Agentes del OIJ de Pococí localizaron en el sitio varios indicios balísticos que fueron recolectados para determinar qué tipo de armas se usaron en ataque. Asimismo, iniciaron el proceso de revisión de cámaras de seguridad en los alrededores del lugar para verificar cómo llegaron y en qué huyeron los responsables de la balacera.
