
Grecia (Redacción). Tres sujetos irrumpieron este lunes a las 11 a. m. en el almacén El Gallo más Gallo de Grecia,
situado al costado sur del Mercado Municipal, y sustrajeron una suma millonaria de dinero.
Aunque no trascendió el monto, se supo que se trataba de las ventas realizadas el domingo y parte de la mañana de este lunes.
Los sujetos ingresaron al almacén como clientes. Adentro dijeron que se trataba de un asalto y sacaron armas.
Obligaron a unas siete personas, entre dependientes y clientes, a lanzarse al suelo primero y luego a introducirse a los baños, donde fueron amarrados.
Además, despojaron a los empleados y clientes de dinero y de los teléfonos celulares.
Una vez que tomaron el dinero de la caja de seguridad, huyeron a pie sin que nadie sospechara afuera de lo que ocurría.
Varios minutos después unos clientes que ingresaron se percataron de que había gente amorzada en el baño y dieron alerta a la Policía.
Afectados
Una de las clientes, quien pidió no ser identificada, dijo que “solo Dios los salvo de algún ataque por parte de los antisociales”. Asimismo, reclamó cómo un almacén de estos no cuenta con agente ni cámaras de seguridad.
Nelson Bolaños, un conocido comerciante de Grecia, también se encontraba dentro del esatblecimiento. Señaló que llevaba un millón de colones para hacer un pago al local y que mientras se tiró al suelo, pudo sacar el dinero que portaba y lo lanzó a otro sitio, donde los ladrones no lo observaron. Cuando lo requisaron, únicamente le quitaron ¢10.000.
El jefe de puesto de proximidad policial de Grecia, Javier Aguirre, lamentó que estos delitos ocurran en locales que no se han sumado a las capacitaciones de seguridad comercial.
Aguerre comentó que se activó un operativo con retenes en los principales accesos a Grecia y que las demás delegaciones cantonales están colaborando en la búsqueda.
El oficial afirmó que desconocen en qué tipo de carro habrían huido los asaltantes.
El caso quedó bajo investigación del OIJ.
Carlos Guevara Chinchilla, funcionario del Gallo más Gallo, dijo que fue un momento muy difícil, ya que los malhechores los amedrentaron y los encerraron en los baños. Además, despojaron a los empleados y clientes de dinero y de los teléfonos celulares.
El local permanecía cerrado aún a las 2 p. m.