Un niño de año y cinco meses de edad fue declarado muerto este domingo a la 1:13 p. m. poco después de que lo sacaron de un tanque séptico plástico.
El suceso se produjo en la comunidad de la Palma en el distrito de La Cuesta, en Corredores, Puntarenas, cerca de la frontera con Panamá.
José Domingo Cruz, jefe regional de la Fuerza Pública, dijo que el hecho ocurrió cuando el menor se salió de la casa y se fue hacia donde estaba el recipiente de las aguas negras y cayó adentro. "No se sabe la razón por la cual ese tanque no tenía colocada la tapa", dijo el jefe policial.
Agregó que fue la misma madre del menor la que lo extrajo y comenzó a hacerle ejercicios de resucitación.
"Me dicen que la alerta no entró por el Sistema de Emergencias 9-1-1 sino que hay una patrulla que esta haciendo un recorrido por el sector y en eso escuchan de una vivienda gente pidiendo auxilio. Los oficiales bajan, llegan al lugar y lo que encuentran es a una madre con un niño en una mantilla tratando de resucitarlo. Tratan de hacerle maniobras y lo que brota de la boca es agua (...) se espera a la Cruz Roja y ellos lo declaran fallecido.
"Fue muy duro porque dicen los muchachos que cuando llegan todo el mundo está histérico, en estado de shock y ellos (los oficiales) tiene que intervenir para tratar de que baje la presión. Lógicamente es comprensible ese estado" relató Cruz.
Trascendió que la madre tiene 20 años y el papá 21.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que agentes se trasladaron al lugar para el levantamiento del cuerpo y el respectivo traslado a la Medicatura Forense, en San Joaquín de Flores, en Heredia.