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Recibir la noticia de tener cáncer de mama metastásico no es fácil y luego de ello hay que someterse a los tratamientos que suelen ser muy agotadores para las pacientes, pero practicar yoga con regularidad y de la mano de expertos puede ser una ayuda para ellas.
Según un estudio de Journal of Clinical Oncology, "Ensayo controlado de yoga en mujeres con cáncer de mama sometido a radioterapia" publicado en abril del 2014, del total de pacientes que participaron, el 68% que reciben tratamiento oncológico presentaron una disminución considerable en los niveles de fatiga al practicar este ejercicio.
Las pacientes que se sometieron al estudio se les dio un seguimiento, quienes practicaron yoga dos veces a la semana tuvieron una sensación de mayor energía y menor somnolencia durante el día, un mejor funcionamiento físico y una mayor calidad de vida.
"La mayoría de los tipos de yoga hacen hincapié en el movimiento y la respiración y no requieren de un cambio total en el estilo de vida del paciente, ya que se realizan algunos movimientos suaves y pasivos y otros rápidos y activos", comentó el doctor Carlos Zúñiga, Presidente de la Asociación Costarricense de Oncólogos Médicos (ACOMED).
Entre los beneficios de practicar yoga se encuentran:
- Reduce los niveles de toxicidad de los diferentes tratamientos que reciben las pacientes, ya que el ejercicio estimula los músculos, activa el flujo de la sangre, provee un equilibrio en las glándulas y sistema linfático, purificando y limpiando el organismo.
- Alivia la tensión acumulada.
- Fortalece los músculos y provee flexibilidad.
- Brinda tranquilidad y equilibrio.
- Mejora la capacidad cardiorespiratoria.
- Mejora trastornos de la salud mental y física.
- Mantiene la mente positiva y optimista para atraer y visualizar armonía y salud en el cuerpo.
- A pesar de los cambios físicos que puedan ocurrir por cirugías, aprendes a aceptarte tal como eres, y vives en gratitud, confianza y seguridad.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Asista a clases con un instructor de yoga con experiencia y certificado.
- Consúltele a un instructor de yoga experimentado en pacientes diagnosticadas con cáncer de mama qué tipo de posturas son seguras para su condición médica.
- En pacientes que padecen metástasis en hueso, algunos tipos de yoga pueden implicar riesgo de fracturas. Si presenta metástasis consúltele a su médico si esta disciplina es apropiada para este caso, o si hay algún tipo de yoga que demande un mínimo esfuerzo u otra práctica para un mejor funcionamiento, como por ejemplo, la meditación o las imágenes dirigidas.
