Brasil (DPA). Dos de los tres travestis que participaron en una cita con el delantero brasileño Ronaldo en un hotel de encuentros en Río de Janeiro en la semana pasada volvieron atrás hoy en sus primeras declaraciones, según las cuales habrían usado drogas y practicado sexo con el jugador del Milan italiano.
Tras tomar declaraciones de los dos travestis durante casi cuatro horas, el comisario encargado de las investigaciones, Carlos Augusto Nogueira, afirmó que ambos "confesaron que han mentido sobre todo lo que dijeron hasta ahora".
"No hubo droga ni sexo aquella noche entre ellos. Dijeron que lo inventaron todo porque no lograron recibir el dinero que pretendían mediante el intento de extorsión", agregó el comisario, quien avaló así la versión de Ronaldo sobre el incidente.
Nogueira volvió a interrogar hoy en Río de Janeiro al travesti André Luiz Albertino, alias "Andréia Albertine", quien fue el autor de la denuncia contra Ronaldo, el 28 de abril pasado. También prestó declaraciones ante el comisario otro de los travestis involucrados en el incidente, identificado solamente como "Carla Tamine".
"Nos sorprendió su actitud hoy. Ellos llegaron a demostrar emoción. Dijeron que identificaron allí una oportunidad de salir de esa vida (de prostitución). Tomaron la oportunidad como una tabla de salvación", relató.
Según el comisario, ambos travestis se presentaron en forma espontánea a la comisaría, precisamente con el objetivo de rectificar su versión inicial. Nogueira rechazó la hipótesis de que "Andréia Albertine" y "Carla Tamine" hayan actuado en base a orientaciones de sus abogados: "No lo creo. Ellos demostraron estar realmente arrepentidos".
Nogueira dijo que, en base a la confesión de hoy, podrá acusar a "Andréia" de intento de extorsión contra Ronaldo, ya que el travesti admitió haber exigido del jugador el equivalente a 30.000 dólares para no divulgar el incidente a la prensa.
La semana pasada, "Andréia" había asegurado que, durante las horas en que permanecieron en el hotel de encuentros de Río, Ronaldo consumió cocaína, mantuvo relaciones íntimas con sus dos colegas y además dio dinero para que salieran a comprar más drogas en una favela cercana.
El delantero del Milan, quien se recupera en Río de Janeiro de una seria operación quirúrgica que se realizó en febrero en la rodilla izquierda, desmintió tajantemente el uso de drogas y la práctica de sexo: "Soy totalmente heterosesxual", dijo, en una entrevista divulgada el domingo por la televisión brasileña.
El jugador afirmó que, al llegar al hotel, creía que disfrutaría de una noche de sexo con tres mujeres, pero que, al enterarse de que se trataba de travestis, intentó deshacer el negocio ofreciendo pagar la tarifa exigida por los tres.
Sin embargo, dijo que "Andréia" rechazó el acuerdo y exigió los 30.000 dólares, que el jugador se negó a pagar.
El escándalo tuvo el impacto de una bomba sobre la vida de Ronaldo. Su novia, la ingeniera María Beatriz "Bía" Anthony, de 23 años, lo abandonó y se fue a vivir con sus padres en Brasilia.
Además, la prensa no descarta que el jugador pueda perder algunos de los millonarios contratos de patrocinio con empresas, que son la fuente de la mayor parte de sus ingresos, calculados en unos 32 millones de dólares por año.
En su primera manifestación pública sobre el caso, el domingo pasado, el jugador que por tres veces fue elegido por la FIFA como el mejor del mundo se manifestó "avergonzado" y "arrepentido" de su "acto estúpido".
"Lloré mucho", dijo el delantero de 32 años, quien admitió que el escándalo dejará una "mancha de por vida" en su imagen personal.
En la entrevista a TV Globo, Ronaldo negó tajantemente la práctica de sexo o el uso de drogas durante la cita con los tres travestis: "No tuve relaciones (sexuales) porque, cuando me di cuenta de que no era lo que yo buscaba, 'saqué a mi equipo de la cancha'. Nunca consumí drogas, sigo siendo un atleta, pese a estar alejado por mi lesión"