La Selección Nacional de Costa Rica llega a Las Vegas, en Estados Unidos, con dos triunfos en dos partidos en la Copa Oro 2025, y con ganas de crecerse en un partido importantísimo contra México, en el que está en juego el terminar en primer lugar del grupo.
Sin embargo, la manera en que los ticos encararon sus encuentros contra Surinam y República Dominicana ha generado un debate sobre el estilo de juego y la consolidación del equipo.
A pesar de los seis puntos en el bolsillo, la sensación general es que la Tricolor aún es una escuadra en formación, buscando su identidad en el terreno de juego. Ahora, el pulso por el primer lugar del grupo contra México se presenta como la verdadera prueba de fuego.
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El camino victorioso de Costa Rica ha sido, cuanto menos, particular. Si bien los resultados han sido positivos, el desempeño no ha convencido del todo, porque se ganó y punto.
La fragilidad defensiva y la falta de contundencia en ciertos pasajes de los partidos activan las interrogantes, a pesar de la alegría de la victoria.
En este contexto, el mediocampista Orlando Galo ofreció una perspectiva franca sobre la situación del equipo, al conversar el jueves con los medios de comunicación que acompañan a la Tricolor en la Copa Oro.
Sus declaraciones reflejan la autocrítica interna y la conciencia de que, a pesar de los triunfos, hay aspectos por mejorar.

“Los partidos son de tres puntos, tenemos dos partidos, seis puntos”, afirmó Galo, reconociendo la importancia de los resultados. Sin embargo, rápidamente añadió: “A veces nos cuesta entender el cómo ganamos los partidos y sabemos que no queremos ganar a como lo estamos haciendo, porque tenemos mucha calidad y debemos demostrarlo”.
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Esta frase subraya la insatisfacción con el desarrollo de los encuentros, a pesar de los marcadores favorables. La exigencia interna en la Selección es alta, y el talento del plantel parece pedir un fútbol más dominante y convincente.
Orlando Galo también hizo hincapié en el esfuerzo del cuerpo técnico y los jugadores, aunque admitió que el camino es largo y que todos dentro del conjunto patrio ponen de su parte para hacer las cosas de la mejor manera.
“El fútbol es de resultados y los resultados que tenemos al frente los hemos sacado”, recalcó, destacando la mentalidad pragmática del fútbol, donde al final lo que cuenta es el marcador.
Pero la realidad dicta que el debate sobre el estilo de juego de la Tricolor no es nuevo y el propio Galo lo ilustró con una reflexión sobre las críticas pasadas y presentes.
“Antes nos criticaban porque éramos muy defensivos, ahora no sabemos si nos critican porque somos muy ofensivos. Son diferentes ideas de los cuerpos técnicos”, indicó.
El futbolista recordó experiencias anteriores, como la participación en el Mundial de Qatar, donde las críticas se dispararon. Además, indicó que en el proceso anterior que llevó a la clasificación a Copa América, el equipo oscilaba entre ser “los mejores y los peores”.
“Al fin y al cabo somos los responsables y sabemos la calidad del grupo que tenemos y lo que podemos dar”, citó, en la cuenta regresiva para el partido crucial contra México.
Con la clasificación a la siguiente ronda asegurada, el enfoque de la Selección está totalmente puesto en el duelo ante los mexicanos.
“Hoy estamos en Copa Oro, haciendo las cosas de la mejor manera, tenemos seis puntos que era lo que primero teníamos de meta, clasificar a la siguiente ronda y ahora vamos contra México que se decide en el primer lugar”, sentenció Orlando Galo.
La ambición por el liderato del grupo es clara y le agrega una pizca de picante al pulso desde el banquillo entre Miguel Herrera y Javier Aguirre.
Así las cosas, el partido entre Costa Rica y México adquiere matices de ser más que un simple juego; porque se convierte en un termómetro real para la “Sele”.
La calidad individual de los jugadores y el trabajo del cuerpo técnico serán puestos a prueba ante un rival que si bien es cierto, no pasa su mejor momento, no deja de ser fuerte.
Pareciera que la intención de todos en la Selección Nacional es mostrar una versión más sólida y propositiva, con esa calidad de la que habla Galo y que confirme que el 100% de rendimiento no es solo una cifra, sino el reflejo de un equipo en camino a la consolidación.

Con metas claras y definidas, como la ambición inmediata de ganar la Copa Oro, algo pregonado por el propio Miguel Herrera una y otra vez; así como la acumulación de experiencia de cara a la última parada de la eliminatoria a la vista, con esos partidos de setiembre, octubre y noviembre contra Nicaragua, Honduras y Haití.
El partido entre México y Costa Rica será este domingo 22 de junio, a las 8 p. m., en el Allegiant Stadium, en Paradise, Nevada, Estados Unidos.
Pero antes de eso, este sábado a las 5 p. m., Miguel Herrera y un futbolista brindarán la rueda de prensa de rigor, en el día previo al juego.
