Se esfumó el sueño de Jones

Montalvo se llevó el oro con un espectacular último salto de 7,06 metros, que dejó fría a May, quien ya saboreaba el triunfo con su registro de 6,94. May, campeona de 1995 y bronce en 1997, se quedó con la plata y Jones tuvo que contentarse con el bronce.

Evidenciando sus conocidas limitaciones técnicas en esta disciplina, Jones no pudo superar la barrera de los 6,83.

Ella aspiraba a conquistar oro en los 100 y 200 metros lisos, el salto largo y un relevo. Ya triunfó en los 100, hoy inicia su campaña en los 200 y hacia el fin de semana correrá el relevo.

El ruso Vyacheslav Voronin, mientras tanto, se quedó con la medalla dorada de salto en alto que no pudo defender el cubano Javier Sotomayor.

Voronin ganó con un registro de 2,37 metros y falló en tres intentos con la barra a 2,40, que le hubieran permitido igualar la marca de la justa, en poder del cubano.

Sotomayor no vino debido a una lesión en la espalda. Pero incluso de haber estado entero, no se sabe si lo habrían dejado competir, ya que tiene pendiente la resolución del caso de dopaje que estalló en los recientes Juegos Panamericanos de Winnipeg, cuando se le encontró cocaína en su orina.

El canadiense Mark Boswell obtuvo la medalla de plata con 2,35 y el alemán Martin Buss la de bronce con 2,35.

Kenia ganó por sexto año seguido los 3.000 con obstáculos, en los que Christopher Koskei se alzó con el oro, en 8:11.76, y su compatriota Wilson Boit Kipketer se llevó la plata en 8:12.09. El marroquí Ali Ezzine conquistó el bronce en 8:12.73.

El estadounidense Michael Johnson, mientras tanto, avanzó a las semifinales de los 400 metros corriendo nuevamente a media máquina.

Ganó su serie aflojando el paso en la recta final, que recorrió lentamente, mirando hacia los costados para asegurarse de que nadie lo alcanzase.

Su tiempo de 45.10, no obstante, fue el quinto de la fase de cuartos de final.