Málaga, 6 ene (EFE).- El técnico del Málaga, Juande Ramos, dijo hoy del Celta de Vigo, rival del equipo malagueño mañana en los octavos de final de la Copa del Rey, que "después de una varapalo como el del pasado sábado estarán deseosos de lavar la imagen" en referencia al 0-5 que le endosó el Deportivo en la Liga.
Ramos no se fía del conjunto vigués porque "intentará hacer un buen partido y demostrar que fue un accidente del fútbol", aunque apuntó que eso también les puede perjudicar y "la confianza la pueden perder".
"La eliminatoria será complicada y difícil, habrá mucha igualdad" porque el Celta es un equipo planificado para jugar la Liga de Campeones", dijo el técnico malaguista, que indicó que las posibles bajas de jugadores no las notarán porque "cuentan todos con un nivel parejo".
A Juande Ramos las posibles ausencias del centrocampista argentino Federico Insúa y del delantero gallego Manuel Canabal, no le preocupan y aseguró que "el equipo no se va resentir y en el Celta igual, porque hay jugadores que les van a suplir de un nivel similar o parecido".
La plantilla del Málaga se ejercitó esta tarde en La Rosaleda y tras el entrenamiento Juande Ramos facilitó los dieciséis convocados que a continuación se concentraron en un hotel cercano a la ciudad y que son los guardametas Calatayud y Goitia; los defensas Josemi, Valcarce, Litos, Sanz, Rojas y Juanito; los centrocampistas Romero, Miguel Angel, Duda, Gerardo y Manu y los delanteros Edgar, Salva y Diego Alonso. EFE
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